El PIT-CNT entregó el martes al Poder Ejecutivo una propuesta de cambios al proyecto de ley del Fondo para el Desarrollo (Fondes) elaborada en conjunto con la Asociación Nacional de Empresas Recuperadas por los Trabajadores, la Unidad de Estudios Cooperativos de la Universidad de la República y la Federación de Cooperativas de Producción del Uruguay.

La delegación de la central de trabajadores integrada por los coordinadores Fernando Pereira y Marcelo Abdala, y por el director del Instituto Cuesta Duarte, Milton Castellano, fue recibida por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, y el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García. El documento propone asignar al Fondes un monto que “no podrá ser inferior” a 20% “de las utilidades netas anuales” del Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) y añade que de esos recursos “será destinado un mínimo” de 60% al financiamiento de “proyectos autogestionarios”.

La normativa vigente establece que el Fondes puede ejecutar “hasta” 30% de las utilidades del BROU, pero no fija un monto mínimo. Por otra parte, el decreto aprobado el 23 de marzo establece que el Fondes se puede fraccionar y además de financiar a emprendimientos autogestionados, también sería utilizado para apoyar a micro, pequeñas y medianas empresas, mientras que el documento del PIT-CNT no contiene esta idea.

Además, mientras que el decreto del Poder Ejecutivo establece un tope de 3% de cada partición como máximo para entregar a un mismo emprendimiento, la propuesta de la central de trabajadores propone “otorgar a una misma empresa, en una misma anualidad, un conjunto de apoyos” de 20% “de las ayudas disponibles para el año corriente” y que “teniendo en cuenta la totalidad de los instrumentos disponibles, no podrá concentrarse en una misma empresa un riesgo que supere el 15% del total del valor de los fondos del Fondes”.

Otro de los planteos innovadores es que con independencia del destino institucional del Fondes -el decreto del Ejecutivo lo divide entre el Instituto Nacional del Cooperativismo y la Agencia Nacional de Desarrollo Económico- haya una junta directiva del fondo, “integrada con mayoría del Poder Ejecutivo y la representación social de los emprendimientos autogestionarios”, con competencia para implementar planes y programas anuales y aprobar el presupuesto, el balance y la memoria anual. También se propone promover “la profesionalización, eficiencia y sustentabilidad de los emprendimientos” apoyados por el Fondes, la capacitación y la reinversión de las utilidades “con la finalidad de incrementar la productividad y favorecer la sustentabilidad”.

Abdala aclaró que cuando el PIT-CNT se reunió con el presidente Tabaré Vázquez, hablaron de “cuestiones más generales” relacionadas con el Fondes, como que “tiene que ser un germen de una banca de desarrollo” y que hay que “establecer un mecanismo de rigurosidad sobre la consideración de cada proyecto”, pero, sobre todo, que el Fondes “no se puede manejar con las mismas reglas de juego que el sistema financiero en general”, porque se trata de “incubar empresas nuevas”. “Para nosotros fue importante que diera su respaldo a la autogestión y que dijera que la ley de Fondes que va a quedar es la que apruebe el Parlamento”, agregó el dirigente. Abdala expresó que el Poder Ejecutivo va a considerar la propuesta del PIT-CNT y que “seguramente devolverá una respuesta”. Luego de esa “devolución”, la central se propone pedir una reunión con la Comisión de Hacienda de la cámara de Diputados, donde actualmente se debate el proyecto de ley de Fondes remitido por el Ejecutivo.

El coordinador del PIT-CNT opinó que los emprendimientos autogestionados que “están basados en la propiedad colectiva de los medios de producción, y en la participación de los trabajadores en la gestión, en el capital y en el riesgo”, tienen que ser valorados por “otro componente” que la “rentabilidad intrafirma”. “Hay que reinvertir, innovar, hay que ser exitoso en esa materia, pero la rentabilidad de estos procesos es mucho más, porque tienen que tener rentabilidad social”, explicó. Abdala puso como ejemplo la recuperación de la ex Metzen y Sena, hoy Cooperativa de Trabajadores Cerámicos de Empalme Olmos. “Comparando el impacto en la población de Empalme Olmos con la de Montevideo, si los trabajadores no hubieran recuperado esa fábrica hubiera sido como si en la capital se perdieran 60.000 puestos de trabajo. Hay que mirar esas dimensiones”, consideró.