Es la principal fuente de agua para consumo humano en Uruguay, y presenta importantes niveles de contaminación de origen industrial, doméstico y agropecuario. Dos años atrás, cuando la aparición de algas cianobacterianas en la cuenca alertó a científicos, vecinos y autoridades porque “representan un riesgo potencial de toxicidad en el agua de distribución” -como informó semanas atrás el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente al presidente Tabaré Vázquez-, el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, opinó que se trataría de “la peor catástrofe imaginable que pueda ocurrir”.

El ministro debía asistir ayer a una reunión con la Comisión de Defensa, pero el encuentro se pospuso para el martes. Los diputados esperan conocer “qué visión y planteos quiere hacer Defensa en torno al tema de la cuenca del río Santa Lucía”, explicó el diputado frenteamplista Víctor Semproni a la diaria.

A fines de marzo, el presidente de la comisión participó en el primer sobrevuelo sobre el centro de la cuenca. Resta el informe y relevo de los legisladores sobre la situación del agua en el nacimiento y la desembocadura del río. “Lo vamos a hacer más adelante”, aclaró. “Se decidió no continuar hasta no hablar con el ministro sobre esto”, añadió.

La comisión analizó la situación y tiene por el momento “una conclusión muy genérica”: en la zona recorrida “hay violación evidente de un montón de las normas establecidas por el MVOTMA”, concluyó Semproni.

Los humedales del Santa Lucía, unas 86.000 hectáreas, se encuentran bajo el Sistema Nacional de Áreas Protegida, al que ingresó por decreto el 9 de febrero. En marzo, el MVOTMA creó un Plan de Acción para la protección del agua en la cuenca, que consiste en 11 medidas, entre las que se exige el tratamiento y manejo obligatorio de efluentes a los tambos ubicados en la zona; la mejora del sistema de vertimientos industriales y la reducción de nitrógeno y fósforo en éstos; el control en la aplicación de nutrientes y plaguicidas, y la implementación de una solución definitiva al manejo y disposición de lodos de la planta de tratamiento de agua potable de OSE en Aguas Corrientes.