Los tres candidatos a la Intendencia de Montevideo (IM) por el Frente Amplio (FA) Lucía Topolansky (Movimiento de Participación Popular, MPP), Virginia Cardozo (Partido por la Victoria del Pueblo) y Daniel Martínez (Partido Socialista) participaron el sábado 25 en el acto de cierre de campaña de esa fuerza política en el Municipio E, que abarca los barrios Unión, Malvín Norte, Malvín Nuevo, Las Canteras, Carrasco Norte, Carrasco, Punta Gorda, Malvín, Buceo y parte de La Blanqueada. En la actividad que se realizó en la plaza de los Olímpicos, también hablaron los dos candidatos a alcalde por el FA, Susana Camarán (MPP) y Eduardo Gravina. Camarán es la alcaldesa saliente, mientras que Gravina surgió como candidato de una elección abierta que organizó la Coordinadora L. La ex alcaldesa recibe el apoyo de los grupos que impulsan a Topolansky, y Gravina recoge adhesiones mayoritariamente de los votantes de Martínez.
Topolansky dijo que en los próximos cinco años hay que “seguir avanzando, de modo que a ningún montevideano le falte la vivienda, el saneamiento o la iluminación en su calle”. “Se ha hecho mucho, y a veces nos acostumbramos a lo bueno. Soy de la generación de la que murieron estudiantes por el boleto gratuito, y ahora ni nos acordamos de eso, porque el boleto [estudiantil] es gratis y nos parece lo más natural del mundo. Y está bien que así sea. Pero debemos guardar esa memoria, para poder proyectarla hacia las generaciones futuras y decirles que todas esas luchas sirvieron para mejorar las condiciones de vida de este departamento”, expresó Topolansky.
La candidata también se refirió a los municipios como tercer nivel de gobierno y dijo que la ciudad “no se construye sólo desde 18 de Julio y Ejido”, sino que “se tiene que construir desde el territorio”, con la “mirada de los vecinos”, que “conocen los problemas que a diario tienen en su barrio, las mejoras que quieren y las ideas que se pueden plasmar”. “Hay que mezclar y juntar la sabiduría de los técnicos, su capacidad para resolver los problemas, con la mirada del vecino, que es el que vive todos los días la realidad. Y si logramos juntar esas dos cosas, vamos a obtener el mejor resultado, porque va a ser un resultado técnicamente bueno pero con los pies en la tierra”, agregó.
Topolansky contó que ese mismo día había participado en la colocación de una “marca de la memoria” en el penal de Punta de Rieles, donde ella y otras mujeres estuvieron presas durante la dictadura. “Ahora hay una marca para que nadie se olvide de que allí hubo presos políticos. Es Montevideo. La ciudad de todo el país que tiene más marcas de la memoria”, expresó.
Cardozo también destacó la labor de los municipios y prometió que les dará “mas recursos y tareas”. Saludó al Municipio E y a los que tienen “candidaturas múltiples” del FA, porque “aceptar” que hay “distintas miradas sobre los temas y distintos énfasis” y dejar que “dialoguen” no “le quita nada” al FA, sino que, “al contrario, le suma”.
La candidata dijo que quiere “recuperar la capacidad de la política de ser de todos”, porque la política “no es propiedad de una clase política, no es propiedad de unos pocos”. Añadió que política se hace en los comités de base, en los sindicatos y en los barrios, entre los vecinos. “Cada vez que tengamos una señal de que nos pesa más la silla que la gente, ésa es la señal de que hay que bajarse y dejarle el lugar a otro”, afirmó. Cardozo hizo un llamado a no dejar “que la derecha marque la agenda” y a no dejar “que pongan en el discurso la gestión y lo administrativo”, porque “Montevideo no es una empresa”. “No tiene nada que ver pensar un shopping que pensar un gobierno departamental”, dijo, en clara referencia al candidato del Partido de la Concertación, Edgardo Novick, uno de los inversores del shopping Nuevocentro.
La casa de al lado
Entre los asistentes había un grupo de jóvenes que portaban pancartas que reclamaban por el derecho a la “vivienda digna”. “Tantas casas sin gente y tanta gente sin casa”, decía uno de los carteles del colectivo Quiero Comprar mi Casa, un grupo de Facebook que ya tiene 2.300 participantes y que ha mantenido reuniones con distintos candidatos de diferentes partidos. “Pertenecemos a esa franja de trabajadores que no puede acceder a un préstamo para una casa, pero tampoco al Plan Juntos. Estamos en el medio. Apoyamos el proyecto de ley del diputado Alfredo Asti (Asamblea Uruguay, FA) para que el Estado intervenga en las viviendas que están vacías en la ciudad, que son más de 50.000”, expresó a la diaria Stephanie Silveira, una de las voceras del grupo.
Finalmente, Martínez saludó a los jóvenes de la Coordinadora L, que tuvieron la iniciativa y organizaron la actividad, y dijo que hay que “aprender de ellos y no criticarlos”, porque las acciones de los jóvenes del FA “bajo la misma bandera” le hacen recordar “el espíritu fundacional” de la fuerza política. “Algunos de los que organizaron esto en Montevideo seguramente no conocen otro gobierno que no sea el del FA”, afirmó. Tomando como ejemplo a esos jóvenes, Martínez dijo que aquellos que pertenecen a sectores, que se enojan “con la gente de otros sectores” y “a veces parece” que estuvieran “al borde de dejar de ser amigos”, tienen que pensar en los fundadores del FA y en su unidad y diversidad. “El FA surgió como la unión de personas muy diferentes, con historias muy distintas y que habían competido por un mismo espacio electoral durante mucho tiempo”, agregó. Para Martínez, el “espíritu fundacional es el de la grandeza de aquellos gigantes”. “Si un día nos calentamos, a sembrar unidad. Unidos podemos seguir cambiando la historia. No importa a quién se vote. Nunca un enojo. Nunca que una barra condicione lo que tenemos que hacer. La unidad y la fraternidad son el único camino para cambiar la historia”, concluyó agitando el candidato.