El Boeing 733 matrícula CX-OAB partió a las 17.30 de Porto Alegre y llegó casi a las 19.00 del martes a Montevideo. Los integrantes de la cooperativa Alas Uruguay recibían así la segunda aeronave de su empresa, que tendrá en total, bajo contrato de arrendamiento, cuatro: tres para uso regular y una de respaldo. El primer Boeing llegó en marzo, y el tercero llegará en los primeros días de julio, confirmó a la diaria Sabrina Acevedo, integrante del directorio de la cooperativa.

Las demoras en el proceso de puesta en marcha tienen que ver con los procedimientos de certificación de las aeronaves. Uruguay certificaba bajo los Reglamentos Aeronáuticos Uruguayos (RAU), pero a partir de enero de este año lo hace bajo las reglamentaciones LAR, de Latinoamérica. “Esto es nuevo para nosotros pero también para la Dinacia [Dirección Nacional de Aviación Civil, que depende del Ministerio de Defensa Nacional]”, aseguró Acevedo. “Las cosas fueron un poco más lento de lo deseado. La Dinacia tampoco tiene muchos recursos humanos. Pero todo está fluyendo, no hay nada trancado”, añadió.

La cooperativista recordó que con el cambio de gobierno el proyecto de financiamiento por medio del Fondo para el Desarrollo (Fondes), por un total de 15 millones de dólares, tuvo una revisión, pero los desembolsos se han cumplido según lo previsto. Actualmente trabajan 90 personas (la gran mayoría ex empleados de Pluna) en Alas Uruguay, en los procedimientos de certificación, en la apertura de las distintas bases en Montevideo, Punta del Este, Asunción, Buenos Aires, Santiago y San Pablo, y en la campaña publicitaria para el lanzamiento de la marca. Acevedo informó que en un mes entrarán 40 funcionarios más y que para octubre, cuando comienza la temporada alta en materia de aviación, habrá 220 empleados.

No quieren manejar fechas para el vuelo inaugural, porque “no depende de nosotros”, dicen, pero los trabajadores estiman que a mediados de julio tendrán las certificaciones correspondientes para poder volar. El primer vuelo será a Asunción, Paraguay, país donde, debido a la escasa conectividad aérea, el trámite para conseguir la certificación es más rápido y no hay dificultades para establecer los horarios de las frecuencias. El resto de los vuelos serán regionales.