El proyecto de ley que institucionaliza el Fondo para el Desarrollo (Fondes) fue aprobado en la madrugada del viernes en la Cámara de Diputados por 59 votos en 89 legisladores presentes. El debate había comenzado el miércoles, en una sesión que debió ser levantada por no votarse a tiempo el pedido de una prórroga, se retomó el jueves a las 21.30 y duró hasta las 3.00 de la madrugada. Además de los 50 diputados del Frente Amplio (FA), votaron el proyecto los legisladores del Partido Colorado Fernando Amado, Walter Verri y Susana Montaner, los del Partido Nacional (PN) Wilson Aparicio Ezquerra y Nicolás Olivera (ambos de Alianza Nacional, AN) y el único diputado de Unidad Popular, Eduardo Rubio, entre otros. La mayoría de la bancada del PN presentó una moción para devolver el proyecto a la Comisión de Hacienda de Diputados, con el propósito de continuar con su discusión e incorporarle aportes, pero la propuesta no prosperó.

El diputado del FA Daniel Placeres (Movimiento de Participación Popular), trabajador de la fábrica recuperada Envidrio, dijo que en los años 90 se aplicó “una política de corte neoliberal” y que, así como la empresa en la que trabaja cayó, “innumerables emprendimientos fueron cayendo y cayendo”. “Cuando asume el FA en 2005, no se recuperaron empresas por recuperar empleo. Eso es difamatorio y es injuria. Se recuperaron empresas en función de mantener el talento de los uruguayos, en rescatar la mano de obra nacional que se iba a perder para las futuras generaciones. El conocimiento no siempre está en la educación. Está en los oficios”, agregó el legislador.

Algunos diputados del PN defendieron los emprendimientos autogestionados en sus departamentos, como la Cooperativa Industrial Maragata (Copima) de San José o la curtiembre El Águila en Florida, pero igual votaron en contra del proyecto.

Por su parte, Rubio anunció su voto favorable, pero aprovechó para repasar algunas situaciones “complejas”, como el aumento de la desocupación y el incremento “de las pérdidas de la empresa ANCAP”.

El texto aprobado propone la partición del Fondes en dos: una parte administrada por el Instituto Nacional del Cooperativismo, destinada a financiar emprendimientos cooperativos, autogestionados y de economía social, y otra gestionada por la Agencia Nacional de Desarrollo Económico (ANDE) para apoyar a las micro, pequeñas y medianas empresas. Una de las principales críticas al proyecto fue realizada por el diputado del PN Jorge Gandini (AN) y apuntó a que se le asigna la administración de 50% del Fondes a la ANDE, una agencia que aún no tiene autoridades designadas por el Poder Ejecutivo y, por lo tanto, “no existe”. Su colega del FA Alfredo Asti (Asamblea Uruguay) aseguró que las autoridades de esta agencia se conocerán en los próximos días.

El proyecto, ahora con media sanción, pasó a tratamiento de la Comisión de Hacienda del Senado.