Al final no habrá dos velocidades para el acuerdo con la Unión Europea (UE). El plan B al que desde hace varias semanas referían figuras del gobierno, ante el supuesto de que Argentina se desenganchara de las intenciones uruguayas y brasileñas de avanzar hacia un acuerdo con Europa, quedó desactivado, al menos en principio, luego de una reunión de los cancilleres del Mercosur que tuvo lugar ayer en Bruselas. En el encuentro, el uruguayo Rodolfo Nin Novoa, el paraguayo Eladio Loizaga, el secretario de Relaciones Exteriores argentino, Carlos Bianco (Héctor Timerman tuvo que quedarse para representar a su país en la cumbre Celac-UE), y el brasileño Mauro Vieira unificaron sus posiciones de cara a la reunión que, horas más tarde, mantuvieron con la comisaria europea de Comercio, la sueca Cecilia Malmström. Con base en ese consenso, el Mercosur logró llevarse de la reunión con la funcionaria europea el compromiso de realizar en noviembre un nuevo intercambio de ofertas entre bloques. “Argentina tuvo una posición que en nada difirió de la nuestra. No hizo ningún planteo en otro sentido”, explicó ayer Nin a Radio Uruguay. Hace una semana, el canciller había desautorizado públicamente al embajador en Bruselas, Walter Cancela, por sostener que el acuerdo era “con los cuatro” países del bloque.

En una conferencia de prensa posterior a la reunión entre los cancilleres del Mercosur y Malmström, la comisaria europea sinceró la situación del bloque abriendo nuevas interrogantes sobre el éxito de las negociaciones, varias veces empantanadas desde que en 1999 se comenzó a hablar de un acuerdo. Explicó que la UE no está lista para el intercambio de ofertas arancelarias con el Mercosur. “Aún no estamos listos. Nadie está realmente listo, es por eso que decidimos incrementar el trabajo técnico”, anunció. De cara a lo que se viene, la funcionaria de la UE pidió “ofrecernos mutuamente garantías sobre el nivel de ambición de nuestras ofertas respectivas y responder a algunas cuestiones técnicas”, dijo. Sobre las ambiciones también versó el comunicado conjunto que el Mercosur y la UE emitieron ayer, en el que valoraron la apertura y franqueza del intercambio “sobre el estado de la situación de las negociaciones para un acuerdo”, al que calificaron como “ambicioso, completo y equilibrado”. La comisaria europea se mostró confiada de esta nueva etapa de negociaciones: “Estamos todos comprometidos para hacer verdaderos progresos”, dijo.