El abogado Fernando Couto denunció al semanario El Eco de Colonia por difamación e injurias, después de que el medio de comunicación informara sobre el proceso judicial que incluyó la incautación de las computadoras de la redacción del semanario en Nueva Palmira, además de la laptop personal de uno de los periodistas. Couto recorrió varios medios de prensa del interior y, alegando que representaba a empresas de software, cobró “multas” e incluso participó en operativos de allanamiento de equipos. Según informó en febrero el semanario Brecha, al cobrar las multas a los medios que utilizaban software ilegal, Couto entregaba una boleta de su estudio personal de abogados por “honorarios”. Además, consultado por ese medio se negó a nombrar a los 27 integrantes de la asociación que preside y se excusó en la privacidad de los clientes.
En diálogo con la diaria, el periodista de El Eco, Gabriel Monteagudo recordó que después de haber cobrado supuestas multas por varios miles de dólares en otros medios del interior, Couto fue al semanario de Colonia, que reconoció la utilización de software ilegal pero se negó a pagar los 20.000 dólares que les pidió el abogado. Según Monteagudo, el modus operandi de Couto incluía un ofrecimiento de arreglar por menos dinero al solicitado para retirar la denuncia, a lo que el medio de Colonia también se negó. Cuando una instancia de negociación entre las partes estaba en marcha, la jueza de Carmelo, Alexandra Facal, dispuso en febrero el allanamiento de las dos sedes del semanario, y pese a que los periodistas reclamaron por la devolución de los equipos, aún no pudieron recuperarlos. Según Monteagudo, no contar con los equipos de una de las redacciones del medio hizo que se corriera el riesgo de no poder publicar, situación que se sorteó con la colaboración de allegados al semanario.
Pero el escenario cambió después de un comunicado de la empresa Adobe en Uruguay -que vende los programas de diseño que usan la mayoría de los medios de prensa- en el que se deslindaba de cualquier tipo de reclamo o inspecciones que se estuvieran realizando en el interior. A raíz de una serie de notas que publicó El Eco sobre el caso, Couto resolvió denunciar al medio por difamación e injurias, y la primera audiencia se realizará el jueves. Según Monteagudo, la denuncia se presenta porque si pierde el caso, el abogado “se tiene que dedicar a otra cosa”.