Según los consultados mensualmente por el Banco Central del Uruguay (BCU), el aumento de precios en julio sería de 0,8% con respecto al mes anterior. La proyección, que elevaría la inflación interanual a 8,58%, es similar a la de julio de 2014. En otro orden, los mismos analistas contrajeron las proyecciones de empleo a una baja de 1,1% en 2015 y las expectativas de aumento del Producto Interno Bruto (PIB) a 2,7% para 2015.

Los consultados elevaron la proyección del aumento de precios para el segundo semestre del año a 2,72%, cifra que incrementa la proyección anual a 8,51% -contra 8,38%, que preveían el mes anterior-. También aumentaron las proyecciones previstas para el año próximo, de 7,98% a 8,16%. La inflación recién comenzaría a bajar en junio de 2017, para cuando estiman un crecimiento de precios de 8,03%. El Comité de Política Monetaria del BCU se reunió hace casi dos semanas y ratificó el rango objetivo para la inflación de entre 3% y 7%.

Además de las inflacionarias, se les consultó sobre la futura evolución del crecimiento del PIB, la evolución del empleo, el resultado de las cuentas públicas y el tipo de cambio, indicadores que conforman las llamadas expectativas económicas. En este sentido, alteraron a la baja la proyección de crecimiento de la economía tanto para 2015 (de 2,9% del PIB a 2,7%) como para 2016 (de 2,7% a 2,45%).

También contrajeron los pronósticos de empleo, que en junio estimaban que disminuiría 0,9% y en esta edición aumentaron a 1,1%. Mantuvieron, en cambio, las proyecciones para 2016, de un leve aumento de la demanda laboral de 0,1%.

En cuanto a los resultados fiscales, también aumentaron levemente las proyecciones de déficit público para 2015, de 3,05% del PIB en junio a 3,18%. Para 2016 estiman un saldo negativo de las cuentas públicas equivalente a 3% del PIB.

Por último, las observaciones con respecto al tipo de cambio continúan fuertemente al alza. Según los analistas consultados, el dólar se ubicará a 27,25 pesos a fines de julio y seguirá aumentando en el correr de los meses, con proyecciones que lo señalan a 27,87 a fines de 2015, a 29,06 en junio de 2016, a 30,32 al cierre de ese año y a 31,85 en junio de 2017.

Los consultados en esta ocasión para obtener tanto las expectativas inflacionarias como las económicas fueron el Instituto de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, Equipos Mori, el banco Itaú, Oikos, el banco Santander y AFAP Sura.