La directora del Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (Sirpa), Gabriela Fulco, lideró ayer una jornada de intercambio con fiscales, abogados y jueces, en la que se presentó el plan para el quinquenio, que apunta a un cambio en la gestión, enfocada en el respeto a los derechos humanos.

Entre los nuevos criterios, se incluye que los abogados defensores y los familiares estén presentes en la instancia de devolución del primer informe de clasificación, para que “haya más elementos de juicio para el diseño del programa de tratamiento que se va a desarrollar”, sostuvo Fulco. También distinguirán entre quienes tengan previsión de condena larga y quienes la estén finalizando.

Se introducirá, además, un instrumento de valoración de riesgo de reincidencia en diferentes etapas de la internación, de manera de reajustar el programa de rehabilitación. Además, junto con el Ministerio de Desarrollo Social se generarán dispositivos que permitan el seguimiento del joven después de egresar”.

Atendiendo al Código de la Niñez y la Adolescencia, que establece que los mayores de 18 años deben estar separados de los menores -lo que hoy en día no ocurre-, la titular del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, Marisa Lindner, se encuentra estudiando ejemplos en los que los jóvenes de entre 18 y 25 años cuentan con un régimen propio.