“Es mucho más que el ahorro en el uso de la energía: es su optimización”, explicó la titular del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), Carolina Cosse, en la presentación del Plan de Eficiencia Energética, ayer, en conferencia de prensa en la Torre Ejecutiva. Se trata de una serie de medidas que apuntan a ahorrar en el período 2015-2024 el equivalente a 1.960 kilotoneladas de petróleo, que, según Cosse, representa 45% de la energía que Uruguay consumió en 2012 y que, según la cotización actual del crudo, significaría un ahorro de unos 677.000.000 de dólares en dicho período. Luego del Consejo de Ministros que se celebró en mayo, la ministra adelantó cifras que preocuparon a la cartera: entre 2005 y 2015, la energía hidráulica pasó de ser 97% de la matriz energética total del país a ser 74%.

Tras una serie de reuniones entre el MIEM y el sector energético (representado por el PIT-CNT, UTE, ANCAP, la Universidad de la República y privados) que comenzaron en abril de este año, se delinearon medidas generales, como la promoción de herramientas financieras, la inclusión de la eficiencia energética en primaria y la enseñanza media, y medidas sectoriales para la industria, el comercio y los servicios, el sector público y las pymes. “A veces no lo pueden encarar, porque necesitan ingeniería, necesitan consultoría, pero en masa son un aumento significativo”, fundamentó Cosse.

Menos es más

El plan incluye el etiquetado de edificios según su uso eficiente de la energía -similar a la norma internacional que clasifica los electrodomésticos de una A verde a una G roja-, que se hará en coordinación con el Ministerio de Vivienda y la Facultad de Arquitectura. Habrá distinciones para los edificios más eficientes, que se sumarán al Premio Nacional de Eficiencia Energética, una serie de estatuillas y diplomas que el MIEM otorga cada año desde 2009, tanto a empresas públicas y privadas como a pequeñas y medianas empresas y edificios particulares, y que en 2014 se otorgó a empresas públicas y privadas como Petrobras, Disco, Zonamérica, UPM (ex Botnia), OSE, Conaprole y Fanapel.

El objetivo del premio es reconocer la eficiencia en el uso de la calefacción, el aislamiento térmico, el uso de energías renovables, la calidad de los sistemas de refrigeración y el aprovechamiento de la iluminación y la ventilación naturales. Según un informe que la Comisión de Eficiencia Energética de la Sociedad de Arquitectos del Uruguay elaboró en 2012, los edificios consumen de 30% a 40% de la energía que se produce en el planeta; en Uruguay, las edificaciones consumen 38% de la energía del país, mientras que el sector del transporte y la industria 32% y 21%, respectivamente.