Del 1º AL 7 de agosto se conmemora la Semana Mundial de la Lactancia Materna, con el lema “Amamantar y trabajar. ¡Logremos que sea posible!”. Ése fue el aspecto central que se abordó ayer en el Ministerio de Salud Pública, en un acto que tuvo como oradores al ministro Jorge Basso, la subsecretaria Cristina Lustemberg, la diputada Bertha Sanseverino y la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz. El objetivo es promover que los recién nacidos sean alimentados exclusivamente con leche materna durante los primeros seis meses de vida y que mantengan la lactancia, con alimentación complementaria, hasta cumplir los dos años.
Si bien Uruguay ha mejorado algunos indicadores, siguen existiendo “graves dificultades con los índices de anemia”, explicó Lustemberg, que mencionó que Uruguay tiene “más de 30% de niños con anemia por déficit de hierro”. Ante un público compuesto mayoritariamente por personal de la salud y la academia, dijo que “todos sabemos las implicancias que tiene tener anemia en los dos primeros años de vida”, en referencia a que las carencias nutricionales a esa edad limitan de manera importante el desarrollo posterior del niño. Aclaró que ese problema se ha identificado en niños que se atienden en instituciones públicas y privadas. Subrayó que “el derecho a criar” tiene que ser garantizado por el Estado, pero insistió en que debe ser “apoyado por toda la sociedad”.
Sanseverino señaló los avances en la legislación de maternidad, paternidad y cuidados logrados con la aprobación de la Ley 19.161, de noviembre de 2014, que contempla que trabajadoras del ámbito privado tengan 14 semanas de licencia por maternidad, el incremento de la licencia por paternidad y la posibilidad de trabajar medio horario (tanto para la madre como para el padre). La diputada del Frente Amplio fue por más: anunció que la comisión de Salud de Diputados está estudiando un proyecto de ley para que las instituciones, tanto del sector público como del privado, con más de diez trabajadoras creen una sala de lactancia. Dijo que seguramente el proyecto sufrirá cambios, porque ya se planteó el caso de trabajadoras de comercios de shoppings, por ejemplo, que tienen menos de diez trabajadoras; por lo que se intentará lograr una redacción que englobe al conjunto comercial.
Entre el público estaba la vicepresidenta del Banco de Previsión Social (BPS), Rosario Oiz. A ella se dirigió María Julia Muñoz cuando mencionó que el BPS “está ofreciendo a todos los organismos del Estado” salas de lactancia. Opinó que “las escuelas y liceos son espacios para salas de lactancia en la medida en que la educación pública aporta al BPS una cifra muy importante para construir la seguridad social de todos los uruguayos”. Para “bregar por la salud integral de los docentes”, planteó que “también tengan un lugar donde amamantar a sus niños”.
En diálogo con la diaria, Oiz comentó que hace dos años que el BPS empezó a apoyar la creación de salas de lactancia y que, al tiempo que instaló las propias en el sanatorio Canzani y en la sede de Colonia y Eduardo Acevedo, recibió el pedido de asesoramiento de otras instituciones. Los costos corren por cuenta de esas instituciones; el organismo asesora en cuanto a cuál puede ser el lugar más adecuado y apoya con instrumentos para la extracción de leche y mamaderas. Respecto del pedido de Muñoz, comentó: “Visualizamos el planteo como una voluntad de que se generaran salas en algunos liceos. Lo vamos a trasladar al equipo de trabajo, para que se contacte con autoridades del Consejo de Educación Secundaria, para ver si existen las condiciones”.