“TRATEMOS DE poner las cosas en su justo término: el TISA no existe”, sentenció el presidente Tabaré Vázquez ayer en la Expo Prado, tras ser consultado por la prensa sobre el retiro de Uruguay de las negociaciones del Acuerdo de Liberalización del Comercio de Servicios (TISA, por su sigla en inglés). “Hay reuniones para ver si se puede llegar a un acuerdo denominado TISA, pero se está trabajando para ver si se va a llegar o no. Hay dificultades en el tratamiento del acuerdo entre los países que están participando, lo que a mí personalmente me hace dudar de que en algún momento se pueda concretar la existencia de algún TISA”, agregó, y señaló que hay “algunas discrepancias, por ejemplo entre Estados Unidos y la Unión Europea”.

Vázquez sostuvo que está de acuerdo con lo resuelto el sábado por el Plenario Nacional del Frente Amplio (FA). “Estoy de acuerdo con el FA porque soy frenteamplista y porque hay un gobierno del Frente Amplio. La ciudadanía votó el programa del FA, y es lo que hay que llevar adelante. Siempre respeté lo que dice mi fuerza política y el programa de gobierno, yo soy un hombre de partido político”, manifestó. Una periodista insistió en el impacto que tendría para Uruguay retirarse de las negociaciones. “Si el TISA no existe, no va a impactar ni positiva ni negativamente”, respondió Vázquez. Acotó que el canciller Rodolfo Nin Novoa no manifestó estar de acuerdo con el tratado, sino que expresó su voluntad de continuar en las negociaciones.

El presidente dijo también que siente el apoyo de su fuerza política. Recordó que en el “conflicto de la educación”, el Secretariado Ejecutivo del FA emitió un comunicado de apoyo al gobierno, y que el mismo respaldo sintió el lunes, cuando se reunió con ese organismo para hablar del presupuesto. Por otra parte, ratificó que no habrá mensaje complementario a la ley de presupuesto y que “quedan tres años para intentar llegar al 6%” del Producto Interno Bruto para la educación. Dijo que los legisladores tienen “toda la libertad para trabajar” en el presupuesto y “plantear sus acuerdos o discrepancias”, y que “lo único que no se puede hacer es agregar gastos”.