El nacionalista Carlos Enciso fue electo intendente de Florida por segunda vez y sumó a las filas blancas al ex colorado José Pedro Delgado, ex candidato a diputado por Vamos Uruguay, ex jefe de Policía de Montevideo durante el gobierno de Jorge Batlle, y uno de los posibles ministros del Interior si el senador Pedro Bordaberry ganaba las elecciones. El 12,9% de votos que obtuvo el Partido Colorado en octubre dejó a Delgado relegado a Florida. Cuatro meses después, el ex colorado hizo público su apoyo a Enciso, que fue reelecto. A cambio, Delgado logró agregar al programa de gobierno de Enciso un apartado especial titulado “Convivencia, seguridad ciudadana y tránsito”. Allí planteó la necesidad de crear una Guardia Municipal que supervise a los ciudadanos para que no se cometan delitos.

Delgado sostuvo que la cercanía de Florida con Montevideo “propicia a que cuando [el Ministerio del Interior] lleva adelante algún operativo de saturación, el delincuente busca continuar con su periplo y elige los departamentos cercanos que le posibiliten una pronta fuga una vez cometido el delito”. Por otro lado, en el programa de gobierno Enciso reflexionaba sobre el tema y concluía: “Atónitos hemos visto cómo se deteriora la calidad de vida de los floridenses a causa de un proceso sostenido de la pérdida de seguridad ciudadana”. La administración nacionalista considera “imperioso que la intendencia explore en el área de la seguridad, asumiendo un nuevo rol del Estado, como ya lo ha hecho en otras áreas como es la obra pública, la atención de centros educativos o las prestaciones sanitarias”. Es así que la Guardia tendrá como objetivo principal “facilitar la convivencia ciudadana y vecinal, prevenir y atender a las víctimas, velar por el orden y la seguridad en actos y espectáculos multitudinarios, prestar asistencia de auxilio a la ciudadanía, instruir sobre buenas prácticas de seguridad personal”.

Una vez que Enciso fue reelecto, los colorados que lo apoyaron recibieron dos direcciones de la intendencia: la de Paseos Públicos, que dirige Walter Hugo Sisto, y la de Administración, que Delgado convirtió en Administración y Seguridad. “La cosa está brava en todos lados”, explicó. Esta nueva área será la encargada de la creación de los cargos de guardia municipal, y de contratar a 15 policías eventuales; esto último amparado en la Ley de Presupuesto General de Sueldos y Gastos de 1957, Nº 12.376, que en su artículo 193 estipuló que los entes autónomos y servicios descentralizados del Estado y las empresas particulares puedan contratar “los servicios especiales que requieran de las Jefaturas de Policía”, tal como hace la Intendencia de Montevideo actualmente. Delgado prevé buscar dentro del funcionariado 25 personas que se conviertan en guardias; en caso de no encontrar interesados o los perfiles requeridos -“una persona que tenga experiencia en seguridad sería ideal”-, aseguró que se realizará un llamado público.

A su vez, Delgado sostuvo que la estrategia de esta nueva administración también incluye la instalación de cámaras de seguridad en toda la ciudad. Los floridenses serán mirados a través de 31 cámaras -que podrían llegar a ser 45- por los guardias municipales en un “centro de monitoreo”; su función será “supervisar que no se cometan delitos”, y en caso de la concreción de alguno, se notificará a los eventuales policías, que son los autorizados para realizar detenciones.

La idea del gobierno floridense es que la Junta Departamental apruebe un fideicomiso que en los próximos días enviará el Ejecutivo departamental para financiar la compra e instalación de las cámaras de videovigilancia, e incluir la contratación de los guardias municipales en el presupuesto quinquenal que deberán presentar a fines de noviembre. Delgado no quiso hacer declaraciones respecto del monto de dinero que se pedirá en el fideicomiso ni sobre cuánto se presupuestará.