Sólo cinco de los 99 diputados tienen la posibilidad de ser presidente de la cámara baja durante el período legislativo, y el año que viene le toca al riverense nacionalista del sector Todos hacia Adelante, Gerardo Amarilla, que sucederá al frenteamplista Alejandro Sánchez. Amarilla, que según dice fue elegido por Dios para desarrollar una “tarea divina” en el Parlamento, reconoce que su carrera política se potenciará: “Es una oportunidad importantísima”, aseguró. Sin embargo, aclaró que no utilizará el cargo “para hacer una diferencia” con los proyectos de ley que presente su partido, aunque como legislador seguirá “empujando” aquéllos que se correspondan con sus “convicciones” y considere “fundamental” que se debatan e incluyan en la agenda legislativa, “más allá de que se vote afirmativo o negativo”; por ejemplo, los que vayan en contra del aborto, el matrimonio homosexual, el fracking, la regulación del mercado canábico, y a favor de tipificar los delitos ambientales, de una división equitativa del tiempo “de contacto de menores con sus padres”, de la internación “con fines de rehabilitación de los agresores dependientes de estupefacientes” en el caso de violencia doméstica.

El sector al que pertenece Amarilla, liderado por Luis Lacalle Pou, oficializó la semana pasada su decisión de promoverlo como presidente de la Cámara de Diputados. Los candidatos con los que compitió el riverense fueron dos: Nelson Rodríguez (Maldonado) y Amín Niffouri (Canelones).

Amarilla explicó que al haber sido designado tan recientemente tiene “algunas ideas de trabajo” para implementar, pero todavía no ha tenido “oportunidad de conversarlas con el sector y con el partido”, ni de “interactuar con los demás partidos”. El diputado entiende que “asumir el cargo significa representar a la cámara como tal”, por ende aseguró que consultará “a todos” para encarar cualquier proyecto.

Dijo que se encuentra a la espera de varios informes que solicitó al actual presidente, respecto del presupuesto, la estructura y el funcionamiento de la cámara. A su vez, indicó que su gestión le dará continuidad a algunos proyectos que fueron presentados en períodos anteriores, como por ejemplo “la reestructura funcional”; contó que ya se planteó analizar en una comisión multidisciplinaria “el tema de mejorar la gestión de la cámara y de reestructurar el Departamento de Asesorías”, pero que todavía no se ha concretado, entre otros. También afirmó que rescatará “el tema de la difusión de la gestión de la cámara”, aspecto promovido por Lacalle Pou durante su presidencia de la cámara, porque considera “que le da más transparencia” a la acción legislativa, aunque señaló que no sabe si los canales que se utilizan para la televisación de las sesiones “son los más adecuados para que la gente se entere” de qué hacen los diputados.

Un voto de fe

El miércoles 9, los políticos cristianos que actualmente ejercen algún cargo público se congregaron en el Centro Cristiano del Cordón y fueron bendecidos por ocupar un lugar “de incidencia e influencia en el país”. En esa ocasión, Amarilla, frente a un auditorio de unas 150 personas, recordó: “Hace cinco años me paré aquí mismo para explicarles la función que iba a cumplir. Era una especie de bicho raro: el primer cristiano evangélico que iba a estar en el Parlamento”, dijo, según recogió El País. Dijo que aquel día fue “interpelado por una iglesia acostumbrada a que la política era una actividad demasiado contaminada para la religión. Creo que a partir de aquella noche, parte de la iglesia entendió cuál era el trabajo y la misión. Resultado: nos multiplicamos”.

Hoy el diputado no es el único evangélico que tiene despacho en el Palacio Legislativo. También están el pastor de la iglesia Misión Vida para las Naciones Álvaro Dastugue, diputado por Canelones, y el ex intendente de Durazno y diputado por ese departamento Benjamín Irazábal. Los tres pertenecen al Partido Nacional (PN). A ellos se les suman varios políticos cristianos más, que también fueron convocados a la ceremonia de bendición: Luis Pintado, diputado suplente de Montevideo (del Partido Colorado [PC]); Grisel Pereira, diputada suplente de Montevideo (PN); Betiana Britos, diputada suplente de Dastugue (PN); Emanuel Borges, edil titular de Soriano (PN); Cristina Ruffo, edila titular de Montevideo (PN); Deybis Rey, edil suplente de Durazno (PN); Gabriel García, edil suplente de Montevideo (PN); Mabel Olivera, edil suplente de Montevideo (PN); Fernando Silva, edil suplente de Soriano (PN); Lilián González, edila suplente de Canelones (PN). A ellos se suman Óscar Farías, director de Gestión Socio-Territorial de la Intendencia de Rivera (PC); y Paula dos Santos, directora de Proyecto Educativo Terciario de la Intendencia de Cerro Largo (PN). También fue invitado Fernando Rodríguez, director del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, del Frente Amplio, pero no concurrió.