La Asamblea General votó ayer a Elena Martínez Rosso como la quinta ministra de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) tras el cese de Jorge Ruibal Pino, y a Alicia Castro como ministra del Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA) tras la salida de Ricardo Harriague Saccone. Ambas venias fueron acuerdos políticos de último momento, y además de los dos cargos se postuló y constituyó la Comisión de Constitución y Códigos de la Asamblea General. Trabajará para “transparentar” las próximas designaciones ministeriales en el Poder Judicial, en base al petitorio de las organizaciones sociales de “participación ciudadana, transparencia y rendición de cuentas” y a un proyecto de ley, presentado en la legislatura pasada, que formuló el Colegio de Abogados sobre los requisitos para las designaciones. En él se plantea, por ejemplo, que los abogados con más de diez años de recibidos y con “reconocida trayectoria” puedan postularse, explicó la diputada Cecilia Bottino, del Frente Amplio.

El régimen de designación de los ministros de la SCJ estipulado por la Constitución requiere una mayoría de dos tercios en el total de miembros de la Asamblea General presentes. Ni el Poder Ejecutivo ni el Judicial tienen iniciativa en el asunto; es un arreglo político que tiene que surgir antes de los 90 días de producida la vacante -ayer faltaban seis días para que terminara el período-, y en caso de que no haya acuerdo ingresa el ministro con más antigüedad, que en este caso es Eduardo Vázquez, integrante del Tribunal de Apelaciones Civil de 1er Turno. Martínez Rosso es la tercera mujer miembro de la SCJ después del retorno a la democracia, y la cuarta en la historia del país: la primera, Sara Fons, ingresó en 1981 y estuvo hasta 1985; la segunda fue Jacinta Balbela, en el período 1985-1989; y la tercera fue Sara Bossio, en 2006-2007. Entre 2016 y 2019 ingresarán cuatro nuevos ministros, ya que Jorge Chediak, Jorge Larrieux, Ricardo Pérez Manrique y Felipe Hounie cumplirán 70 años y deberán jubilarse, por lo que se prevé que ingresen más mujeres.

Según la información del Poder Judicial, Martínez Rosso ingresó a la magistratura el 11 de diciembre de 1981 como jueza de Paz de la 1ª Sección de Colonia. Luego ocupó, sucesivamente, la titularidad en el Juzgado de Paz de la 6ª Sección Judicial de Canelones (03/10/1983), del Tribunal de Faltas (28/12/1988), del Juzgado de Paz Departamental de la Capital de 2º Turno (02/10/1989), del Juzgado Letrado de 1ª Instancia de San José de 3er Turno (10/11/1989), del Juzgado Letrado de Primera Instancia del Trabajo de 4º Turno (09/05/1990), del Juzgado Letrado Civil de 15º Turno (19/08/1991) y del Tribunal de Apelaciones de Familia (23/04/1997). Desde el 13 de marzo de 2002 se desempeña como ministra del Tribunal de Apelaciones en lo Civil de 6º Turno. Martínez es docente en la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, en la Universidad Católica y en el Centro de Estudios Judiciales del Uruguay.