El “año presupuestal”, entre otros factores, había puesto en cuestión la continuidad del Festival Internacional de Artes Escénicas (FIDAE), un tema que el director nacional de Cultura, Sergio Mautone, no eludió ayer durante el lanzamiento de la programación del encuentro, en el que se invertirán unos cinco millones de pesos. “Como demostrara el Ministerio de Economía y Finanzas, finalmente podemos, y en tiempo récord, concretar el FIDAE, que para nosotros es una iniciativa importante de mantener, no solamente por el espacio simbólico que ocupa, sino también porque este año corresponde la cuarta edición, en año impar, y queremos respetar esta lógica que convive con otros festivales que se presentan en la región”, dijo Mautone. En un lapso bastante apretado, de unos tres meses, el gestor cultural y abogado argentino José Miguel Onaindia, ex asesor artístico del teatro Solís, asumió la responsabilidad de ponerle contenido a esta nueva edición del FIDAE. Como “resultado de un trabajo muy arduo y muy festivo”, como lo calificó el propio Onaindia, se decidió dar “preeminencia a obras de países latinoamericanos”.

Mariana Percovich, directora de Cultura de la Intendencia de Montevideo, aprovechó para anunciar la creación de un Festival de Intervenciones Urbanas, que se alternará con el FIDAE en los años pares, a partir de la primavera de 2016. La idea surgió a partir un seminario de investigación que involucró a la Escuela Nacional de Bellas Artes, la Facultad de Arquitectura y la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático. “Vamos a generar intervenciones urbanas, que pueden ser trabajadas con artistas plásticos, con escritores, con gente de la danza, del teatro y de la música. Con un equipo de curadores vamos a elegir zonas de la ciudad y proponer artistas que presenten proyectos”, dijo Percovich.

En cartel

La semana próxima se pondrán a la venta, por Red UTS, Abitab y Tickantel -de acuerdo con el escenario que corresponda a cada función-, las entradas para los espectáculos que ofrecerá este FIDAE entre el 5 y el 18 de octubre, en siete salas de cuatro departamentos (Montevideo, San José, Canelones y Salto). Los precios costarán a partir de 100 pesos y permitirán asistir a los montajes de ocho compañías provenientes de Argentina, Cuba, España, Bolivia y Chile. El cierre será en el Auditorio del SODRE con la versión de Mucho ruido y pocas nueces con la que el Globe Theatre de Gran Bretaña regresa a Uruguay, un año después de haber presentado un fresco y algo polémico Hamlet en el Solís.

La Asociación de Críticos Teatrales del Uruguay seleccionará las cinco obras de autor nacional que se sumarán a la programación. Dos de ellas quedarán seleccionadas la semana entrante, cuando se celebre la 15ª Bienal de Teatro del Interior, en Paysandú. Por otro lado, el festival y la Comedia Nacional homenajearán al recientemente fallecido Antonio Taco Larreta con la reposición de Las maravillosas.

En coincidencia con el FIDAE habrá, como es habitual, espacio para el Coloquio Internacional de Teatro, cuyo énfasis estará en la relación de William Shakespeare con el teatro contemporáneo uruguayo; la Escuela de Espectadores será nuevamente de la partida, y en un intento de “generar relaciones institucionales a futuro”, Onaindia anunció la firma de convenios de colaboración con el Festival de Dramaturgia de Buenos Aires y el Frinje de Madrid, aparte de fomentar que directores de otras muestras se empapen de la oferta que el teatro nacional ofrece.

Natalia Me∫néndez, directora del Festival de Almagro, dará una charla y se reunirá con artistas locales que trabajen sobre el teatro barroco. Salvador Bolta presentará su proyecto La mujer del monstruo, que durante el Frinje de Madrid convocó a dramaturgos españoles a elaborar un espectáculo sobre las esposas de los dictadores. Ese mismo formato será propuesto a creadores iberoamericanos para completar los avances de sus pares europeos.

La grilla apuesta a la “diversidad, un término complejo, porque se usa muchas veces como eslogan y tiene un contenido semántico preciso, pero en este caso refiere a diversidad temática, estética y en el sistema de producción”, sostuvo Onaindia. Por eso, junto con la llegada del Globe Theatre podrá constatarse el nivel de lo más nuevo del teatro alternativo de la región, con Mi hijo sólo camina un poco más lento, entre otras. La obra del croata Ivor Martinic, dirigida por Guillermo Cacace, es “uno de los grandes acontecimientos teatrales de Buenos Aires”, según Onaindia, y “la única obra de teatro alternativo con entradas agotadas hasta 2016”.

La apertura del festival ocurrirá en la sala Hugo Balzo con Dos voces, dos orillas, una misma trama, un espectáculo de música y poesía a partir de textos de Jorge Luis Borges e Idea Vilariño, interpretados por Roberto Jones y su colega argentina Graciela Borges. La protagonista de películas inolvidables, como La ciénaga (Lucrecia Martel, 2001), también brindará un “diálogo” en la sala Tractatus, donde contará anécdotas de su vida acompañada de imágenes que resumen su carrera. De Argentina, directamente al teatro Larrañaga de Salto irá ¡Afuera!, obra en la que “un tipo de la ciudad cuenta una historia del campo”, basada en fragmentos de Don Segundo Sombra, de Ricardo Güiraldes.

Desde Cuba llegará a la sala Verdi Antigonón, un contingente épico, en la que Carlos Díaz y sus actores visitan el mito abriendo un abanico de implicaciones, entre ellas, con la historia de la isla. De allí vendrá, por otra parte, una propuesta de danza titulada Momentos. Brasil también traerá danza, pero a El Galpón, con el espectáculo Devir. El nihilismo actual se cuela en el Romeo y Julieta de Aramburu que traerán los bolivianos. Pero seguramente, en ese género, lo más esperado sea el regreso del coreógrafo argentino Pablo Rotemberg (La idea fija) con la pieza para cuatro bailarinas La Wagner, sobre los estereotipos.

Del Festival Internacional de Buenos Aires vendrá Brecht, una obra de gran formato, con 14 actores en escena, que está en cartel en el Centro Cultural San Martín. Los directores Agustín Mendilaharzu y Walter Jakob querían llevar a escena El círculo de tiza caucasiano, pero ante los escollos encontrados, propusieron finalmente una meditación sobre los derechos de autor, la apropiación y la creación. La actriz Carmen Machi -que cobró notoriedad con la película Ocho apellidos vascos- representará a España con Juicio a una zorra, que plantea un nuevo punto de vista sobre Helena de Troya, en un monólogo que el director Miguel del Arco escribió para el Festival de Mérida. Un clásico de las tablas chilenas, La remolienda, que el malogrado Víctor Jara creara en 1965, recreará una vez más las confrontaciones de la cultura urbana y la rural. Onaindia destacó que el festival es un lugar de encuentro, de allí la importancia de “sostenerlo y darle singularidad” con respecto a los que se realizan en la región.