Leche cortada

“Somos jóvenes pero hablamos en serio”. Fue la primera alerta que lanzó, en su cuenta de Twitter, el ingeniero agrónomo de San José Marcos Algorta Antía, una de las caras visibles de la protesta. El joven productor, de 27 años, ha explicado que la movilización apunta a reclamar, entre otras cosas, el pago de la deuda que mantiene Venezuela con Conaprole. En menos de cinco días, la convocatoria creció y ahora son diez los puntos en los que se manifestarán productores de varios sectores. Algunas gremiales apoyaron, mientras que otras se mantienen al margen por “falta de formalidad” de la convocatoria.

“Todo empezó el jueves de tarde en un grupo de Whatsapp que tenemos con unos diez amigos de la facultad [de Agronomía]. Ya veníamos hablando del tema de la capitalización de ANCAP y la deuda de Venezuela, y el tema que terminó de derramar el vaso fue el aumento de las tarifas [de OSE, UTE y Antel]”, relató a la diaria Rosina Algorta Antía, hermana de Marcos. Ambos son hijos de la directora de Desarrollo de la Intendencia de San José, Mercedes Antía, y sobrinos del intendente de Maldonado, el nacionalista Enrique Antía. Con el hashtag #PorelcampoPorelpais, los promotores de la movilización empezaron a convocar a posibles adherentes mediante las redes sociales. “Pensábamos que íbamos a ser 20, pero después empezaron a compartir y retuitear; la gente está desesperada”, observó Rosina.

La manifestación, en un principio, se iba a concentrar en un bloqueo de la ruta 1, a la altura del kilómetro 54, en la rotonda con la ruta 45, en San José, pero con el pasar de los días se extendió a varios puntos del país. Al cierre de esta nota, se habían adherido productores de Florida, Flores, Río Negro, Durazno, Colonia, Cerro Largo, Canelones, Maldonado y Rivera. La convocatoria también se había extendido a otros rubros de la producción. Sergio Betancourt, un productor de carne de Flores, explicó a la diaria que allí el corte se realizará a la altura del kilómetro 164 de la ruta 3. Dijo que esperan recibir a diputados del Frente Amplio y del PN, y que se contactaron con el intendente, Fernando Echeverría, quien les aseguró que “se va a dar una vuelta”. Martín Pangallo, productor agrícola de Colonia, explicó, por su parte, que se tratará de una manifestación pacífica: “Vamos a enlentecer el tráfico, nada más”.

Altas cabezas

“Basta de bajar la cabeza” es una frase que se repite en la convocatoria. Rosina explicó que uno de los objetivos es que los productores dejen de “ser sumisos” ante la situación. “El gobierno nos exprime y el campo siempre aguanta, no es un sector de manifestarse. Pero ¿hasta cuándo nos van a seguir exprimiendo? Porque si el país, que se sustenta con el agro, no nos ayuda a pasar esta mala racha, no salimos más”, razonó. Rosina pretende que con esta convocatoria el presidente Tabaré Vázquez “se haga cargo del tratado con Venezuela” y que “aparezca la plata”.

Los convocantes aseguran que se trata de una manifestación apolítica; sin embargo, en las redes sociales se apreció que las mayores adhesiones o gestos de aprobación se dieron entre dirigentes del PN. El diputado herrerista Jaime Trobo fue uno de los primeros en sumarse; también retuitearon la convocatoria, sin agregar nada más, los diputados Pablo Abdala y Gerardo Amarilla y el senador Luis Lacalle Pou.

En cuanto a las gremiales agropecuarias, algunas manifestaron simpatía y otras tomaron distancia de la forma elegida para la manifestación. Dirigentes de la Federación Rural, entre ellos su presidente, Fernando Dighiero, confirmaron su asistencia; lo mismo hizo el secretario de la Cámara Uruguaya de Productores de Leche, Darío Jorcín, quien además, en diálogo con Tiempo de cambio, de Radio Rural, evaluó que la convocatoria “es un tirón de oreja para todas las gremiales lecheras”, porque “no han trabajado [con el gobierno] de la manera que los productores esperan”. Por su parte, el presidente de la ARU, Ricardo Reilly, advirtió a El Observador que “es importante ser cautos con las formas en que se hacen los planteos” en defensa de “otros ciudadanos, que en este caso estarán circulando por las rutas nacionales y tienen toda la libertad de hacerlo”, mientras que el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche, Rodolfo Braga, también fue cauto con “la forma de manifestar la protesta”. “El medio para lograr una llegada al gobierno es a través de las gremiales”, dijo a El Observador.

El presidente de la Comisión Nacional de Fomento, Mario Buzzalino, dijo a la diaria que si bien “es probable que alguno de los productores asociados vaya, no hay un apoyo formal a la movilización”. “Entendemos perfectamente el planteo; de hecho, vivimos de lo mismo, pero creemos que hay formas más maduras, no esa actitud de pintarse la cara e ir a las trincheras”.

A nivel local, las críticas fueron todavía más explícitas. Mariano Albistur, directivo de la Asociación de Productores de Leche (APL) de San José, integrada por unos 200 socios, comentó a la diaria que la gremial resolvió ayer, en una reunión, que no convocará a participar en el corte de ruta. “En algo sí estamos de acuerdo: tenemos costos de producción demasiado altos, la rentabilidad es baja y, en este contexto, la medida de aumentar las tarifas públicas parece algo poco lógico y hasta desatinado. Pero como gremial seguimos apostando al diálogo con el gobierno, por lo tanto no podemos sumarnos a una medida que claramente perjudica cualquier canal de negociación”, resumió. Albistur dijo que los cortes de ruta están “fuera de lugar”, aclaró que la idea nunca se presentó ante las gremiales del sector lechero y que las caras más visibles de la protesta no integran la APL. “Es una falta de respeto para los que venimos trabajando seriamente; es una piedra en el camino de las negociaciones. Creo que en esto hay una intencionalidad política clara; no podemos sumarnos, porque apostamos a trabajar con seriedad y a encontrar soluciones para los productores”, sentenció el dirigente maragato.