El PIT-CNT está administrando el camping y complejo de cabañas La Aguada, ubicado en La Paloma, Rocha, y le está yendo “muy bien”, según dijo el referente de la central sindical en este nuevo emprendimiento, Rodolfo Vázquez. Lo mismo dicen algunos de los empleados que desde hace años trabajan allí, a pesar de que los dueños cambien cada tanto. Vázquez asegura que se cambió la lógica de explotación del camping: pasó de tener fines de lucro a invertirse pensando en “el derecho del trabajador a vacacionar”. El proyecto del PIT-CNT es capitalizar el camping y mantenerlo abierto todo el año. Para ello esperan poder hacer convenios con diferentes organismos. También quieren ayudar al pueblo de La Paloma, pero aún no saben exactamente cómo hacerlo.

El camping La Aguada pertenece a la Intendencia de Rocha (IR), está ubicado en la intersección entre la ruta 15 y Avenida de los Argentinos, tiene 22 cabañas, 400 parcelas, una zona para motorhomes y capacidad para aproximadamente 4.000 personas. Además, tiene un almacén, un restaurante y un bar de comidas rápidas, los tres tercerizados, cancha de pádel y tres baterías de baños con agua caliente las 24 horas. Generalmente se licita su gestión por tres o cinco años, pero el año pasado ningún privado se presentó para explotarlo. A fines de octubre el intendente de Rocha, Aníbal Pereyra, decidió presentar la propuesta de concesión hasta 2020 al PIT-CNT, sin pago de canon (que en la licitación que quedó desierta se establecía en 300.000 Unidades Indexadas, que representan, a la fecha, 971.400 pesos) pero con la exigencia de capitalizar el lugar. A fines de noviembre, la central sindical aceptó y empezó a trabajar en la refacción del camping. El contrato lo firmó el Instituto Cuesta Duarte, porque el PIT-CNT no tiene personería jurídica. Según Vázquez, ya hablaron con la Dirección General Impositiva para pasarlo a nombre de la central sindical antes de la temporada que viene. El PIT-CNT pretende crear una colonia de vacaciones accesible a todos los trabajadores, que no cierre una vez que finalice el gobierno frenteamplista de Pereyra. “Desde ya digo que si hay que hablar con los partidos tradicionales para continuar trabajando aquí, se hablará”, aseguró Vázquez.

Según contó el encargado, lo primero que se hizo fue reparar los quinchos de todas las cabañas y construir diez nuevas. También se repararon las instalaciones eléctricas de todo el complejo y las piletas de cada parcela y se acondicionaron las calderas para el agua caliente. Se compraron 60 bomberitos, garrafas, se cortó el paso, se limpió el lugar, se compró un vehículo y se abrieron las puertas del camping el 26 de diciembre, con el nombre Wladimir Turiansky. Según Vázquez, hasta ese momento se habían invertido 1.800.000 pesos; sin contar el dinero invertido en los arreglos urgentes que se van detectando a medida que se utilizan las instalaciones. El secretario de finanzas del PIT-CNT, Julio Burgueño, estima que en total se invirtieron 2.300.000 pesos. “Quedaron un montón de cosas en el debe, como pintar las cabañas; tenemos la pintura, pero ahora no se puede hacer porque están ocupadas”, aseguró Vázquez.

Los primeros cuatro días de enero el camping se colmó: fueron unas 3.000 personas; pero después el número menguó considerablemente, y el domingo 17 había casi 600 personas. Una cabaña para dos personas por siete días cuesta 11.000, 13.500 pesos para cuatro personas, 15.500 pesos para seis y 18.000 pesos para ocho personas. Por cada vehículo se cobra 40 pesos por día. En el camping hay tres sectores: el A, que es el más caro (ocupar una parcela cuesta 200 pesos por persona) incluye pileta, agua, fogón y electricidad. Le sigue el sector B, que cuesta 150 pesos, con la desventaja de que no hay agua, por lo que los acampantes deben ir hasta una pileta grande compartida. Y el sector C es el más rústico y sólo cuenta con un fogón. Vázquez aseguró que todo lo recaudado se invertirá en el lugar.

El dirigente explicó que para esta temporada se fijó una tarifa única para afiliados a sindicatos y trabajadores en general, porque “todo se armó sobre la marcha”, pero revisarán qué hacer para la próxima temporada. Añadió que tampoco pudieron pensar en los artesanos que se quedan en el camping y trabajan en las ferias. “Se va a ver qué hacer para que ellos paguen poco”, dijo, y agregó que la idea es formalizar su trabajo para que se afilien al Banco de Previsión Social y eventualmente se sindicalicen. “El trabajador consciente sabe que el método es afiliarse a una central única. No es presionar, es tratar de formalizar”, aseguró.

Respecto de las perspectivas y proyectos, Vázquez dijo que prevén realizar convenios, principalmente con el Ministerio de Educación y Cultura, para que niños y adolescentes del norte del país que no conocen el mar puedan ir a vacacionar al camping. “Acá va a haber juegos infantiles, que ya están pedidos, e instalaremos una estación de gimnasia”, aseguró Vázquez. “Queremos dejar el camping en un nivel alto y que el trabajador venga todo el año”, finalizó.

Respecto de cómo “ayudar” al pueblo palomense, Vázquez señaló que actualmente sólo la seguridad del camping está a cargo de 12 trabajadores que vinieron de Montevideo; el resto de los puestos se ocupó con gente local. Hay 18 trabajadores contratados por la temporada, uno de ellos ya pasó a ser efectivo del PIT-CNT y la central prevé incorporar algunos más. El almacén está tercerizado a un comerciante rochense, Marcelo Piolo; el bar de comidas rápidas y tragos está en manos de Alfredo Quintián, que tuvo un almacén durante cinco años en el camping de Punta Rubia.

Por otro lado, Vázquez indicó que el cuadro de baby fútbol de La Aguada tiene un predio del camping cedido, y en el correr del año se reunirán con los responsables del equipo “para ver cómo se puede colaborar para que la canchita quede en funcionamiento. Eso hace años que está ahí y no se usa”, aseguró.

Por otro lado, la Junta Departamental de Rocha aprobó el martes el envío al Tribunal de Cuentas del contrato de la concesión del camping. La moción fue apoyada por la oposición y cinco ediles del oficialismo. El edil Humberto Alfaro (Partido Nacional) dijo al diario El País que la licitación por la explotación quedó desierta porque “el pliego era bastante exigente” y “una de las condiciones que se ponía era la refacción del complejo, y para eso se colocaba un listado muy específico que debía ser cumplido por el oferente junto con el pago anual de un canon”. Uno de los puntos que Alfaro señala como llamativo de la concesión es que “se hizo con una brevedad inusitada”, ya que el predio se entregó en un plazo de 15 días. Además, asegura que el contrato con el PIT-CNT debía cumplir con los requisitos del pliego y no lo hace, ya que no pagarán canon. Consultado al respecto, Vázquez dijo que Burgueño irá a la Junta Departamental de Rocha a presentar todos los datos que soliciten; está tranquilo porque, asegura, tienen la casa en orden.