El viernes, el subsecretario de Economía y Finanzas, Pablo Ferreri, respondió a gremiales empresariales, sindicatos de trabajadores y a la oposición política, que consideraron que el aumento de tarifas de Antel (9,4%), UTE y OSE (9,85% cada una) es un ajuste fiscal encubierto por parte del Estado. El jerarca sostuvo que todas las tarifas públicas (incluida la de ANCAP) bajaron en términos reales desde 2005, mientras que el senador nacionalista Luis Lacalle Pou lo negó y propuso como alternativa usar las reservas internacionales del Banco Central, lo que constituye “un grave error conceptual” en opinión de Ferreri.

El martes 12, el directorio de UTE anunció mediante un comunicado que subiría todas sus tarifas 9,85% a partir de la medianoche, hecho que motivó que Lacalle Pou acuñara el término -y hashtag- “tarifazo”, del que rápidamente otros políticos se hicieron eco.

Al día siguiente, se manejaba que OSE subiría las tarifas en un porcentaje similar, Antel 9,4% para la telefonía móvil y 26% para internet, motivando más palos, a los que Ferreri salió al cruce en la tarde del viernes. En su cuenta de Twitter, el subsecretario publicó una gráfica en la que mostró que desde 2005 a la fecha “todas [las tarifas públicas] han bajado en términos reales”: la de ANCAP, aproximadamente 60%; Antel, casi 40%; y OSE y UTE, poco menos de 10%. Sin embargo, varios se quejaron del recurso, por “no tener en cuenta los costos marginales” y el hecho de que hay materias primas que cada vez son más baratas, y esto debería propiciar una baja nominal y no real; Ferreri prefirió no responder a estos comentarios.

“Manotazo de ahogado”

Lacalle Pou no se mantuvo al margen. Por el contrario, presentó una propuesta alternativa: utilizar las reservas monetarias del Banco Central, algo que Ferreri rechazó categóricamente. “El gobierno en sus esfuerzos para controlar su aumento [del dólar] lleva gastados un par de miles de millones de dólares de reservas, y el dólar igual crece. ¿No será que los recursos que tenemos se tienen que utilizar para otras cosas?”, sugirió el nacionalista en una entrevista con Radio Sarandí, y consideró que “estamos como manotazo de ahogado”.

Por su parte, Ferreri dijo a la diaria que la de Lacalle Pou es una propuesta “inconveniente” porque llevaría al país a “disminuir sus fortalezas financieras, justamente, un factor que inspira confianza en Uruguay”. El jerarca explicó que al disminuir las reservas, aumenta la deuda neta, y también agregó que el activo del grado inversor, que “nos costó mucho recuperar”, es “algo que hay que cuidar”. También dijo que le “llama la atención que la propuesta venga de alguien que critica la situación fiscal del país” porque se trata de una “inconsistencia conceptual”. Sobre el uso de las reservas, lo negó categóricamente y aclaró que “es una postura que escuchamos meses atrás, cuando [el ex ministro de Desarrollo Social, Daniel] Olesker [ahora asesor del PIT-CNT] salió a hacer el mismo planteo” para aumentar los salarios de los funcionarios públicos.

El líder del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, coincidió con Ferreri: “Tiene razón”, dijo en su cuenta de Twitter. “Sería pan para hoy y hambre para mañana”, consideró y agregó: “Las reservas, además, en su amplia mayoría no nos pertenecen; si usamos lo poco que es nuestro debe ser para cancelar deuda no para aumentarla”. También coincidió con Ferreri el economista consultor Javier de Haedo, quien tuiteó: “¿Tú también, Brutus?”, en referencia a Lacalle Pou.