Exactamente a las 12.45 de ayer tocó el suelo del Parque Anchorena el helicóptero en el que arribó a Uruguay el presidente de Argentina, Mauricio Macri, en su primera visita oficial a un país extranjero. De la aeronave descendieron, detrás de Macri, el jefe del Gabinete de Ministros, Marcos Peña, la ministra de Relaciones Exteriores, Susana Malcorra, el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzón, y el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo. La delegación la completó el embajador argentino en Uruguay, Guillermo Montenegro, que había llegado previamente a la residencia presidencial de descanso. En la escalinata de la entrada al casco de la estancia, donde estaba previsto realizar el almuerzo de trabajo, el presidente Tabaré Vázquez recibió a Macri luego de que éste fuera homenajeado con honores de jefe de Estado por parte de un destacamento de los Blandengues de Artigas. Se abrazaron, saludaron a los periodistas para el registro fotográfico e ingresaron a la residencia para almorzar cordero al asador.
Enhorabuena
La empresa Terminal Cuenca del Plata (TCP), operadora en el puerto de Montevideo, emitió ayer un comunicado felicitando a ambos presidentes por haber puesto fin a la prohibición de transbordo, “una medida que durante más de dos años obstaculizó el flujo de cargas entre ambos países”, ocasionando “serios perjuicios al sector logístico uruguayo y al sector exportador argentino”.
A las 14.55, casi dos horas después, los dos presidentes brindaron una conferencia de prensa, en la que no hubo preguntas, porque Macri tenía que estar de vuelta en Buenos Aires a las 16.00. Vázquez comenzó dándole la bienvenida a Macri y agradeciéndole “la deferencia de visitar Uruguay y que sea éste el primer país que visita en ejercicio de su mandato”, pero enseguida aclaró que es algo que no le sorprende, “dado el grado de simpatía y de empatía que ha demostrado” con el país y el pueblo uruguayo. El mandatario calificó la reunión de “muy fructífera en acuerdos que son trascendentales para ambos países” y destacó que “los dos gobiernos” asumieron que tienen que “estar a la altura” del “hermano pueblo argentino y del hermano pueblo uruguayo en su relacionamiento”. “El relacionamiento entre ambos pueblos es profundo, fraterno, de verdaderos hermanos, y debe servir de ejemplo a los gobiernos de ambos países”, manifestó Vázquez. Afirmó que con la reunión de ayer comenzaron “ese camino”. Luego anunció que lograron un acuerdo para “trabajar en conjunto en el monitoreo medioambiental” de los “ríos comunes” y de los “espacios comunes”, “estableciendo la creación de un laboratorio de última generación de control medioambiental, aéreo, en el agua, la tierra”, que sirva para que los países se apoyen mutuamente y que también se pueda impulsar “para que lo utilicen otros países del Mercosur y de la región”.
Gas para acá, gas para allá
“Hemos avanzado sustancialmente en un acuerdo que ya está prácticamente concretado sobre la producción energética que va a tener Uruguay de gas natural regasificado, gas licuado, un emprendimiento en el que Argentina va a comprar el gas producido en Uruguay. Creo que en un año, un año y poco, estaremos enviando gas a Argentina como hemos acordado con el señor presidente de ese país. Esto implica para Uruguay que la obra de la regasificadora se va a cumplir y la vamos a terminar en un tiempo prudencial”, afirmó Vázquez. Luego, el mandatario dijo que también habían acordado algo que le pareció “revolucionario”. “Hemos acordado trabajar en conjunto para elaborar un plan estratégico binacional de política portuaria, para que tanto los puertos argentinos como los uruguayos, utilizando las facilidades que tenemos en los ríos o en nuestra proximidad geográfica, se puedan desarrollar en conjunto”, agregó.
A su turno, Macri dijo que tiene “un profundo sentimiento” que lo vincula “con el pueblo uruguayo”. “Son muchos años, muchas experiencias vividas, muchos momentos muy lindos que he disfrutado junto a afectos, junto a amigos acá en este maravilloso país. Por eso es que en esta primera visita oficial estoy acá, porque desde hace rato venía expresándole [a Vázquez] y a múltiples amigos que quería que retomásemos los vínculos históricos que hemos tenido. Todos tenemos claro que somos dos pueblos unidos por la historia, por el afecto, y que tenemos un futuro que compartir”, expresó el mandatario, visiblemente emocionado.
Macri dijo que descubrió que “a poco de empezar” ya tenían “iniciativas muy valiosas”. Afirmó que “un decreto no muy feliz” afectó “el funcionamiento de los puertos uruguayos y también de los argentinos”, y que su derogación, una resolución del Ministerio de Transporte que Macri llevó recién firmada, “va a permitir nuevas oportunidades para ambas comunidades”.
Sobre el acuerdo de la regasificadora dijo que hay que aprovechar “la infraestructura que tiene Uruguay” y se refirió a que en un momento de la historia se hizo un gasoducto “para abastecer de allá para acá” y que ahora se debe usar para “abastecer de acá para allá”. “Eso es entender con flexibilidad que hay que complementarse, que ése es el desafío. Confío en que estas dos iniciativas que emprendemos son el principio de muchas más. Tenemos mucho por crecer. Lograr que en el Río de la Plata haya pobreza cero es realmente un objetivo, una meta que nos compromete a ambos presidentes”, añadió Macri.
“Hemos decidido que no hay mejor oportunidad que comprometernos también a candidatearnos juntos para ser sede” del Campeonato Mundial de Fútbol de 2030, anunció Macri, ocasión en la que se cumplirán 100 años del primero, que se realizó en Uruguay. “La condición que hemos puesto es que los jóvenes que estén en ese momento no se olviden de invitar a estos viejos a asistir al Mundial, porque son muchos años por delante, pero estas cosas hay que empezar a planificarlas, a pelearlas, a plantearlas con anticipación”, manifestó. Macri terminó su oratoria contando que Vázquez le ofreció la estancia de Anchorena para que venga “a disfrutar con la familia” y que esa invitación se la había “tomado muy en serio”. “Así que espero volver pronto”, concluyó el mandatario argentino.
Punto final
El embajador uruguayo en Argentina, Héctor Lescano, informó que los presidentes tuvieron una reunión a solas, aunque hubo intercambio con la delegación. También estuvo presente en el encuentro el canciller Rodolfo Nin Novoa. Lescano mostró a los periodistas la resolución del ministro de Transporte de Argentina que derogó la disposición de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables que establecía que las cargas de exportación originadas en puertos argentinos no podían ser transbordadas en puertos uruguayos. Lescano destacó el “hecho histórico” de que se realice una reunión “de trabajo, a nivel presidencial” un “7 de enero” y de que Macri haya venido a Uruguay “antes de cumplirse un mes de asumir su cargo”. Sobre la regasificadora, el embajador dijo que Macri tiene “interés político de participar en la obra”, pero no dio detalles de cómo sería la integración al proyecto. También valoró el “acuerdo fuerte” sobre el monitoreo de los ríos, considerado “uno de los temas duros de la agenda bilateral”, y recordó que la reciente designación de Darío Estades como cónsul en Gualeguaychú “es un hecho más que está en esa línea”. Para Lescano, el diferendo con Argentina por la pastera UPM “está muy cerca de llegar a su punto final”. El embajador dijo que hubo otros temas en la reunión que los presidentes no pudieron informar por cuestiones de tiempo, como el de “la conectividad aérea”. “Hay una buena disposición de Argentina para que empresas de bandera uruguaya retomen las frecuencias que teníamos tradicionalmente con Ezeiza y Aeroparque, y de Argentina con el Aeropuerto de Carrasco y el de Laguna del Sauce”, explicó.