La Corporación Urbana de Cooperativas reúne a 280 trabajadores de nueve cooperativas sociales y de trabajo que se encargan del cuidado de los espacios públicos de Montevideo. Manur, La Colmena, Coopseur, Cootrase, General Flores, Egea, Alborada, A pesar de todo y Caminando la fundaron en marzo de 2012, como parte de la Federación de Cooperativas de Producción del Uruguay (FCPU). Su labor consiste en la vigilancia de parques y plazas, la limpieza y mantenimiento de esculturas, monumentos y murales, y la guía a turistas que lo soliciten. La IM es su principal cliente.
Su convenio con el gobierno departamental venció el 23 de diciembre, y desde entonces están negociando la renovación con las autoridades, que de entrada advirtieron que habría una disminución en la asignación presupuestal. “De 120 millones de pesos que teníamos presupuestados, ahora tenemos que ajustarnos a 80”, contó a la diaria el vocero de la corporación, Pablo Caballero.
La propuesta para tal reducción comprende, en primer lugar, el cese de 55 puestos de trabajo en la noche, dedicados a la vigilancia de parques y plazas. De momento, los cuidadores se distribuyen de tal manera que quedan dos o tres por plaza -según la problemática de la zona- y cuatro o cinco por parque -según el tamaño del espacio-. Como parte de las medidas de ahorro presupuestal, la IM propone reducirlos a uno por plaza y dos por parque, intención que los trabajadores no comparten, porque entienden que “peligra la seguridad de los ciudadanos y de los propios trabajadores durante la noche”, según el vicepresidente de la corporación. “Nosotros cumplimos la función de educar en el uso de los espacios públicos; esta reducción no sólo pone en riesgo la seguridad de la población sino que también la integridad de los compañeros”, sostienen. En cuanto a la pérdida de puestos de trabajo, la IM aseguró a los dirigentes de la corporación que pasarán a “otros emprendimientos” de la comuna, aunque aún no se ha profundizado en cuáles son las alternativas.
Otro recorte propuesto por la IM refiere a la cantidad de encargados, quienes velan por que el servicio se realice de manera correcta. Al día de hoy, 15 personas supervisan dos proyectos cada una; las autoridades del gobierno departamental sugieren reducirlas a cinco, a lo que la corporación retrucó con una propuesta de nueve supervisores, cada uno a cargo de 40 trabajadores.
Tras la reunión con las directoras de la división de Espacios Públicos, Hábitat y Edificaciones y del departamento de Acondicionamiento Urbano de la IM, Patricia Roland y Silvana Pissano, y el coordinador de la Unidad de Economía Social y Solidaria del departamento de Desarrollo Económico e Integración Regional, Daniel Arbulo, los dirigentes manifestaron que no había muchas novedades. En marzo, los trabajadores cuyos puestos queden vacantes pasarán a seguro de paro. En un principio la IM pretendía que éstos estuvieran amparados por 90 días, pero desde la corporación solicitaron que el plazo se reduzca a 45. Por otro lado, pidieron que las negociaciones por las alternativas al trabajo nocturno comiencen en menos de dos semanas.
Los cooperativistas bregan por la defensa de las fuentes de trabajo, la calidad de los servicios a la comunidad y en apoyo a este modelo de gestión. Los trabajadores, además, entregaron una carta al intendente, Daniel Martínez, para “ponerlo al tanto de la situación” que están atravesando y solicitarle una entrevista personal “a la mayor brevedad posible”. Mientras tanto, la próxima reunión con las autoridades está fijada para el lunes a las 15.00.