La evocación de la unidad de ayer sirvió a los dirigentes del PIT-CNT para alertar sobre el presente. El PIT-CNT celebró el sábado de noche en el teatro El Galpón los 50 años del Congreso de Unificación Sindical, que instituyó a la Convención Nacional de Trabajadores (CNT) como representante del movimiento sindical. En esa instancia se aprobó un programa del sindicalismo, de acuerdo a lo definido en el Congreso del Pueblo en 1965, y la CNT se declaró independiente frente al Estado, los empresarios y los partidos políticos.

El dirigente Marcelo Abdala recordó el contexto en el que se dio el proceso de unificación en 1966. “Fue posible un congreso de unificación porque antes los trabajadores habíamos mordido el polvo de la derrota, cuando peleábamos divididos contra las grandes patronales, y contra el Estado muchas veces. La unidad no se construyó desde la dirección, se construyó al calor de la lucha”, manifestó.

Abdala sostuvo que la unidad en aquella coyuntura fue una “herramienta en nuestra lucha por la emancipación”, y también fue contra “el capital financiero y la rosca oligárquica”. “Unidad por solidaridad, por el panorama que vivía América Latina, pero también fue una unidad de tipo ideológico, a partir de la consideración de que nuestros países vivían un capitalismo dependiente”, señaló.

Abdala sostuvo que el PIT-CNT es “independiente y sin partido”, y que nunca “fue cooptado ni por los partidos políticos ni por el Estado”, lo que no quiere decir que defienda “el apoliticismo y la indiferencia”. Afirmó que los trabajadores se unen en “tiempos difíciles” y que esto “lo sabe el enemigo, a veces para copiar”, en referencia a la conformación, a fines de agosto, de la Confederación de Cámaras Empresariales, que nuclea a 20 entidades. “El gran capital arma un PIT-CNT de los patrones”, comentó Abdala. También alertó acerca de que “representantes de la extrema derecha convocan ahora a la unidad de la derecha sin exclusiones, en momentos de una nueva contraofensiva del imperialismo norteamericano y una derecha continental que hoy se manifiesta con nuevos bríos”, en probable alusión a los discursos pronunciados por dirigentes blancos y colorados en un almuerzo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing la semana pasada. En esa instancia, el senador nacionalista Luis Lacalle Pou llamó a toda la oposición a juntarse en el balotaje contra el Frente Amplio (FA).

“Las conquistas del movimiento obrero quieren ser retrasadas por las clases gobernantes”, afirmó Abdala. Luis Iguiní, de la Comisión de fundadores y ex dirigentes de la CNT, respondió al presidente de la Asociación Rural del Uruguay. En su discurso durante la clausura de la Expo Prado, Ricardo Reilly había cuestionado al gobierno por la presión tributaria y criticado “la ideología” de grupos que “no representan la visión de la mayoría del sistema político”. “Parece que son amnésicos los estancieros, y los capitalistas en general”, comentó Iguiní, mencionando los beneficios que recibió el campo en la historia del país.

El presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, mencionó algunos avances logrados durante los gobiernos del FA, como la aprobación del matrimonio igualitario, la despenalización del aborto, y los derechos conseguidos por las trabajadoras domésticas y los trabajadores rurales. Llamó a “no abandonar la futura agenda de cambio, no soltar los sueños, no creer que algunas cosas por las que peleamos han pasado de moda: mayor equidad, mayor justicia social; y, aunque se caliente la derecha, ir buscando caminos que lleven al socialismo”.