Las renuncias de los 21 pediatras estaban firmadas desde hace un mes, cuando los profesionales iniciaron el conflicto con la Cooperativa Médica de Florida (Comef), como forma de presionar y dejar claro que estaban dispuestos a tomar la medida más extrema. La fecha de renuncia se activaría el 30 de setiembre si los médicos no encontraban soluciones a sus reclamos; el tema se extendió unos días más e incluyó una reunión de 11 horas el lunes en la Dirección Nacional de Trabajo. Los pediatras presentaron otra propuesta y esperaron hasta las 16.00 de ayer la respuesta de los directivos de Comef. No la hubo, y renunciaron.

Sobre las 18.30 dieron una conferencia de prensa en Florida, acompañados por dirigentes del Sindicato Médico del Uruguay, del Sindicato Médico de Florida y de la Sociedad Uruguaya de Pediatría.

El punto en el que hubo mayor distanciamiento fue el de la instrumentación de una solución a la cobertura de los traslados; hasta ahora deben ocuparse de ellos los pediatras que están de guardia en emergencia y que, además de ese puesto, cubren la atención domiciliaria de urgencia. Mario Romero, uno de los pediatras que renunciaron, explicó a la diaria que pedían dejar de hacer los traslados para ocuparse de dos tareas simultáneas, en lugar de tres. Agregó que estaban dispuestos a cobrar menos por dejar de cubrir ese servicio, pero que la mutualista se negó. Días atrás, el presidente de Comef declaró a la prensa floridense que el conflicto era salarial, “que lo único que nos interesa es el dinero”, lamentó Romero.

La mutualista quedó sólo con tres pediatras, todos cooperativistas, dijo el pediatra. la diaria intentó, sin éxito, comunicarse con las autoridades de Comef. Así como la mutualista, el hospital también deberá reforzar este servicio, puesto que el prestador privado suele recibir a muchos de los niños que se atienden en el hospital.