El trabajo viene “a buen ritmo”, dijo Julio Bango, secretario nacional de Cuidados. A partir de abril, el Sistema Nacional de Cuidados (SNC) abrió una convocatoria que recibió 5.000 llamadas, mitad de asistentes y mitad de personas que solicitaron asistencia. Desde agosto se realizan las visitas y entrevistas, y ya se asignaron los primeros asistentes a personas con discapacidad severa. Los primeros beneficiados de este nuevo régimen, en un plan de implementación gradual, son los mayores de 85 años y menores de 29. Hasta el momento, el servicio les correspondía a las personas que cobraban pensión por invalidez, pero ya no.
La SNC habilita y registra a las personas y empresas que pueden prestar el servicio, valora a los aspirantes a usuarios y define el subsidio correspondiente según los ingresos de la familia. El Banco de Previsión Social es el encargado de pagar y llevar el registro de usuarios. Según informaron a la diaria desde el SNC, están funcionando alrededor de 1.500 “binomios” (un usuario y un asistente brindando el servicio), y aproximadamente una tercera parte pertenece al nuevo régimen de dependencia severa.
Los que brinden el servicio de cuidados cobrarán 11.862 pesos nominales por cuatro horas diarias, con un máximo de 80 mensuales. El Estado se hace cargo del salario vacacional y el aguinaldo. El objetivo del SNC es llegar a 3.500 binomios conformados en 2017.