La histórica “Obreros y estudiantes, unidos y adelante” no fue la consigna de la XVII Convención de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), que comenzó el viernes y va hasta las próximas semanas, pero estuvo implícita en la dedicatoria a Pablo Carlevaro y Wladimir Turiansky. La mesa de apertura, en la Facultad de Ingeniería, contó con la participación de Clemente Rayo Estable (hijo del reconocido científico uruguayo) y Samuel Sztern, ex director de la Escuela Nacional de Bellas Artes, que homenajearon a Carlevaro, mientras que Fernando Pereira, presidente del PIT-CNT, y Eduardo Platero, fundador de la CNT, recordaron a Turiansky. En diálogo con la diaria, el secretario de Comunicación de la Mesa Ejecutiva de la FEUU, Marcio Mañana, comentó la elección de los homenajeados: “Son dos compañeros que se nos fueron en estos últimos tiempos y a los que entendimos muy importante reconocer en esta instancia, no sólo por lo que hicieron en la interna de la Universidad, sino por lo que han aportado con su militancia a lo largo de toda su vida hasta las últimas horas, con sus diversos puntos de vista. Entendemos que son personas representativas de la mejor historia de las mejores causas de nuestro país; uno más vinculado al movimiento sindical y otro más a la Universidad, dos ámbitos que no pueden ser divisibles”.

El viernes, algunos delegados de la FEUU se acercaron también a la jornada del PIT-CNT y aprovecharon para sacarse una foto con Dilma Rousseff, con la bandera de la federación desplegada. “Manifestamos solidaridad por el proceso que se está dando en Brasil: impulsmos dentro de la Universidad la postura de rechazar el golpe de Estado en Brasil, en el entendido de que es una propuesta legal pero ilegítima a todas luces; al no haber habido crimen de responsabilidad, abiertamente, es un golpe”, fundamentó Mañana.

Ese día, además, se votó el reglamento general de la convención. Se dividió en tres talleres en torno a los ejes de coyuntura nacional e internacional, universidad, y organización de la FEUU. En cada uno de ellos, los convencionales electos de los distintos centros de estudiantes presentaron documentos para discutir y generar relatorías que el fin de semana que viene, en los plenarios, se votarán como líneas de trabajo para los próximos dos años. El primero, donde hubo “posturas muy encontradas”, según Mañana, se centró en “las condiciones del capitalismo en la sociedad que tenemos a nivel mundial y, particularmente, en nuestra región”; el segundo giró en torno al rectorado de Rodrigo Arocena, y las posturas en contra, a favor y de apoyo crítico a la segunda reforma universitaria que impulsó; el tercero, que se llevó a cabo ayer, fue una revisión del funcionamiento interno de la organización y un repaso de la campaña de impulso de la FEUU al proyecto de ley que envió al Parlamento sobre derechos de autor y acceso a los materiales de estudio.

En todo el fin de semana participaron 150 estudiantes -más que los que asistieron a la convención pasada-, lo que Mañana evalúa como una participación “muy nutrida” para las discusiones internas de la federación. “Es un avance cualitativo y saludable, porque la convención es más rica cuantos más estudiantes participen”, afirmó.