Buscando llenar un vacío en la formación específica y atendiendo la demanda que estimuló la puesta en marcha del Sistema Nacional Integrado de Cuidados (SNIC) y la universalización de la educación para los niños y niñas de tres, cuatro y cinco años, el Consejo de Formación en Educación (CFE) lanzó ayer la carrera de maestro de primera infancia, un complemento de la tecnicatura en educación inicial creada en 2013.

La carrera creada por un grupo interdisciplinario apunta a formar educadores de niños desde el nacimiento hasta los seis años y comenzará a dictarse como tal a partir de 2017 en ocho puntos del país: Tacuarembó, Rosario, Rocha, Ciudad de la Costa, Florida, Pando, Paysandú y Montevideo.

En los últimos cinco, además, se abrirá tercero para los egresados de la tecnicatura que quieran continuar la carrera. Durante 2015 egresaron unos 150 técnicos, y el integrante del CFE y coordinador de la carrera, Luis Garibaldi, estima que se seguirá adelante con una cantidad “similar”. Asimismo, se mantendrá la titulación intermedia de asistente técnico de primera infancia, peculiaridad que no tienen otras carreras en educación y que se debe a que “en el campo laboral de la primera infancia se requieren no sólo maestros, sino técnicos que trabajen en equipo”, sostuvo Garibaldi.

La demanda de educadores, tanto a nivel inicial como primario es “muy grande”, estimó el maestro, y consideró que la reforma en la formación debe ser “integral”. “El año 2017 va a ser de consolidación de los cambios en las becas y que tienen que ver con el aumento en la cantidad y la mejora en su gestión; también estamos desarrollando y fortaleciendo la modalidad semipresencial para los profesorados y desarrollando una similar en magisterio para atender la demanda urgente de la ciudad de Bella Unión; esta carrera de maestros en primera infancia va en esa línea”, explicó.

Transversal

El contenido de la carrera está previsto para permitir la atención de niños en ámbitos públicos y privados, formales y no formales, a efectos de “acompañar las políticas de Estado llevadas a cabo”, como el SNIC, sostuvo Garibaldi.

“Cuesta mucho aún entender la importancia de la educación en primera infancia y, sobre todo, en las habilidades socioemocionales”, consideró, por su parte, la subsecretaria de Salud, Cristina Lustemberg, quien afirmó que la carrera apunta a cubrir estos vacíos. Destacó la integralidad del SNIC y sostuvo que “en primera infancia tenemos que embanderarnos todos”. También anunció que las prácticas que se llevarán a cabo en los cuatro años de carrera rotarán además por centros educativos y por centros de salud “públicos y privados”. El Ministerio de Salud firmará “próximamente” un convenio con el CFE por este tema, adelantó Lustemberg.

En tanto, el presidente del Consejo Directivo Central, Wilson Netto, consideró que se trata de un “gran avance conceptual e instrumental”. Dijo que en la educación se da “una logística muy compleja” para atender la escasez de educadores. Esto exige a los propios docentes una circulación en todo el país e incluso que los ya jubilados vuelvan a ingresar al sistema, lo que redunda en “un desgaste de la profesión”. En este sentido, afirmó que la carrera en primera infancia aliviará esa presión, que se ha vuelto más intensa con la universalización de la educación en tres, cuatro y cinco años, que acercará el próximo año a unos 32.000 nuevos niños a los centros: 1.500, 13.000 y 20.000 en cada caso. Agregó además que el compromiso del gobierno de duplicar el egreso de jóvenes del nivel educativo medio “también va a permitir una distribución mayor en el nivel terciario y muchos de ellos seguirán la formación docente”.