Son los que llevan adelante los proyectos y políticas de fomento y desarrollo de la cultura. Y dicen que están cansados. Los trabajadores de la Dirección Nacional de Cultura (DNC), nucleados en la Asociación de Trabajadores de Educación y Cultura (ATEC), denuncian que pasan los equipos de dirección y “nadie se preocupa por quienes la sostienen”. Exigen que no se vulneren más los derechos de los trabajadores, que se acaben los “salarios sumergidos” y que se deje de “ningunear e ignorar las denuncias por abuso de poder”, ya que “mantener al abusador en su puesto de trabajo es legitimar y avalar el abuso”. En un comunicado divulgado el lunes, destacan que la DNC contrató a personas externas a la institución por “cinco millones de pesos” con la intención de “darle una impronta profesional” al trabajo de elaboración de las bases hacia el Plan Nacional de Cultura, y que en “modalidades similares” contrató a profesionales para trabajar en el Sistema de Circulación Cultural, “desconociendo la capacidad de los recursos humanos a la interna de su institución”. En esta línea, exigen que la DNC realice “un relevamiento que analice y detecte cada una de las inequidades existentes”, para organizar las áreas y programas contemplando los perfiles laborales de los trabajadores y las tareas que se espera que estos desempeñen, respetando que “a iguales funciones, igual remuneración”. Piden también parar con las tercerizaciones, los “contratos chatarra” y las “soluciones parciales”, y que no haya más trabajadores “trabajando sin contrato y fuera de la ley”. Quieren también la “erradicación de los ñoquis que se llevan la plata del pueblo”, y se movilizan hoy a partir de las 17.00, cerrando la calle San José, entre Paraguay y Héctor Gutiérrez Ruiz, con espectáculos artísticos.