Las medidas gremiales fueron resueltas la semana pasada por el Consejo de Banca Oficial; serán parciales, a las 15.00 con una duración aproximada de media hora. Se extienden desde hoy al jueves y abarcan a todos los bancos oficiales, incluyendo a la Agencia Nacional de Vivienda (ANV). Hoy es el turno de las dependencias de Artigas, Salto, Paysandú, Río Negro, Soriano, Colonia, Flores y San José.

La movilización es contra la decisión del Banco República (BROU) de cerrar dos o tres días de la semana 14 sucursales de pequeñas localidades, que se suman a otras siete que ya abren sólo algunos días de la semana.

Se concentrarán en las puertas de 21 sedes del BROU de pequeñas localidades para leer la proclama: Tomás Gomensoro, Baltasar Brum (Artigas), Quebracho (Paysandú), Nuevo Berlín, San Javier (Río Negro), Palmitas (Soriano), Conchillas, Minas de Corrales, Tranqueras, Tambores, San Gregorio, El Carmen, La Paloma (Durazno), Casupá (Florida), Migues (Canelones), Fraile Muerto (Cerro Largo), Vergara, Olimar, Cerro Chato (Treinta y Tres), Batlle y Ordóñez (Lavalleja), Velázquez (Rocha). En Montevideo el punto de lectura será en la sucursal 19 de Junio, ubicada en la avenida 18 de Julio. En las sedes del interior del país esperan ser acompañados por ediles y alcaldes y eso es una novedad; la Asociación de Bancarios del Uruguay (AEBU) ha salido a buscar apoyo político y, según publicó el jueves el semanario Búsqueda, las juntas departamentales de Rivera, Soriano, Canelones, Paysandú, Durazno y Florida ya se pronunciaron contra la decisión.

El miércoles, en conferencia de prensa, Gonzalo Pérez, dirigente de AEBU, expresó su disconformidad, porque se trata de localidades donde la sede del BROU es la única institución financiera y, además, reúne población añosa que no está adecuada a los nuevos modelos tecnológicos. “Esto es un retroceso a la prestación que tiene el BROU en todo el país, no encontramos los motivos por los cuales decide cerrarlas, son dependencias chicas, que tienen una baja cantidad de operativas, son incluso dependencias que dan pérdida, pero lo que hay que estudiar es el balance al cierre contable del año, y desde 2005 a la fecha el BROU continuamente ha dado ganancias con estas dependencias que efectivamente dan pérdida”, reclamó.

Álvaro Pevere, integrante del Consejo del Sector Financiero Oficial, explicó ayer a la diaria que el sindicato había propuesto al BROU mantener abiertas esas sucursales del 1.º al 10 de cada mes, para que pudieran cobrar presencialmente los jubilados. Pero el banco “respondió que no, que iba a hacer una fuerte campaña publicitaria de educación financiera, donde a los jubilados se les explicara lo de los préstamos en línea y el e-brou”. “El sindicato está de acuerdo en continuar con la educación financiera”, afirmó Pevere. “No es el cuestionamiento al proyecto del banco, sino esencialmente a la aceleración, sin una buena educación financiera y con los problemas que hay en algunas zonas de campaña para tener conectividad y acceder a internet era apurar a que fueran a cajeros, cuando ni siquiera había billetes menores de 500 pesos”, dijo, y acotó que a pedido de AEBU, el BROU accedió a poner billetes más chicos en lugares retirados de grandes centros urbanos.

Según Pevere el BROU no planea cerrar las sucursales, sino “sacar al personal para que vaya a vender productos financieros: hay que buscar a los clientes en las localidades más chicas y no esperar a que los clientes vengan al banco”. De acuerdo a lo que transmitió, la idea es contactar a pequeños y medianos productores y a pequeñas y medianas empresas, por ejemplo. “Los compañeros pasarían a ser vendedores de los productos para que los visualicen, la idea es que los trabajadores sean los propios vendedores de los productos financieros en esos lugares en que hay días de la semana que tienen poco movimiento”. “Nosotros no nos negamos a que este proceso de optimización de funcionarios al servicio del banco se ponga en práctica, cuestionamos la aceleración”, expresó, y dio cuenta de que “lo que está en discusión, en el fondo, es la transformación del trabajo que nosotros ofrecemos como empleados bancarios, y del sistema financiero”. Por eso, el dirigente insistió en que “tiene que haber una mesa de diálogo permanente”. Para eso, se creó una comisión bipartita integrada por el sindicato y las autoridades bancarias para monitorear lo que ocurre en esas sucursales. La mesa de negociación está instalada, pero hasta ahora no llega a acuerdos.