La de hoy será la última sesión del año de la Cámara de Representantes, y se espera que el cuerpo trate una importante cantidad de proyectos. Si bien en el orden del día de la sesión aparece tan sólo una enmienda a uno de los artículos del Protocolo de Kioto, lo que se va a discutir hoy en la Cámara de Diputados tiene poco y nada que ver con el cambio climático. Este proyecto se presenta como una excusa para citar de forma extraordinaria a la cámara y levantar el receso parlamentario, explicó un legislador del cuerpo. Luego de eso, se llamará a una sesión extraordinaria para tratar los temas que realmente se quieren abordar, que comenzará unas horas más tarde que la primera convocatoria. “Siempre se deja un temita en el orden del día, por si acaso”, explicó el representante. De esta manera, se puede convocar a la cámara cuando sea necesario cumpliendo con el reglamento.

Entre los proyectos que realmente se abordarán mañana está el que prorroga la permanencia de los 249 soldados uruguayos en Haití hasta abril de 2017, luego de que la Organización de las Naciones Unidas resolviera en octubre de este año mantener las tropas internacionales por un semestre más. Si bien la iniciativa ya fue aprobada en la Cámara de Senadores y la Mesa Política del Frente Amplio (FA) “recomendó” a sus legisladores aprobar el proyecto, este no contará con el voto de uno de los 49 diputados oficialistas, Luis Puig, del Partido por la Victoria del Pueblo, sector que se ha opuesto consecutivamente a votar esta extensión desde 2014. En el Partido Nacional (PN) también hay una postura disímil; aunque la mayoría de los legisladores tienen una opinión favorable a extender la permanencia de la misión en Haití, Edgardo Mier, Sebastián Andújar y Graciela Bianchi no acompañaron la anterior prórroga de la misión el año pasado. Por su parte, el Partido Independiente (PI) y Unidad Popular votarán en contra del proyecto. De aprobarse, la iniciativa recibirá la sanción definitiva.

Otra iniciativa que la Cámara de Diputados deberá abordar es una modificación del proyecto de Ley de Inclusión Financiera, a raíz de una serie de problemas en la aplicación de sus plazos. El proyecto original establecía restricciones al uso de efectivo para ciertos pagos específicos y operaciones de elevado monto para el “primer día del mes siguiente al año, a contar desde la vigencia de la presente ley”, fecha que se hubiera cumplido en mayo de 2015, de no ser porque el Poder Ejecutivo extendió el plazo en una primera instancia hasta enero de 2017. Un proyecto ya aprobado en Diputados a principios de diciembre extiende ese plazo hasta julio del año que viene, pero el texto recién será aprobado en el Senado mañana. Esto conlleva un problema: como las leyes entran en vigencia diez días después de su promulgación por parte del Poder Ejecutivo, habrá un período “ventana” durante los primeros días de enero, en el que la prórroga no será válida y regirán las modificaciones de la norma original. Por eso, la Cámara de Diputados deberá aprobar hoy un paliativo para eliminar ese “período ventana”, que terminará siendo votado en el Senado mañana, posiblemente junto con la extensión de los plazos de la inclusión financiera que provocaron este agujero legal.

Además, la cámara baja aprobará el proyecto de ley que regula el funcionamiento interno de la Fiscalía General de la Nación. El borrador fue firmado por legisladores del oficialismo y del PN, el Partido Colorado y el PI, aunque con algunas salvedades por parte de los legisladores opositores.

Enfrente

La bancada de senadores del FA tendrá una reunión hoy para definir qué temas abordará durante la sesión final de mañana. Además de las modificaciones a la inclusión financiera, la senadora Lucía Topolansky confirmó a la diaria que uno de los temas que aprobará la cámara es el proyecto de transparencia fiscal, que elimina en ciertas circunstancias el secreto bancario y que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados. También es posible que se vote la iniciativa modificatoria de la actual normativa sobre zonas francas. El texto establece plazos de 15 y diez años, respectivamente, para la autorización de las zonas francas en las actividades industriales o comerciales y de servicios. Además, se prohíbe a las empresas realizar actividades fuera de las zonas francas beneficiándose de la exoneración, pero, a diferencia de la normativa vigente, se contemplan algunas excepciones, entre ellas las cobranzas de carteras morosas y la exhibición de productos.