Los trabajadores de los sectores arrocero, ganadero y lechero negocian desde hace cinco meses un convenio salarial que sustituya al que venció el 30 de junio, pero sin éxito. Ante la gran distancia de posiciones entre empresarios y trabajadores, el miércoles 7 el Poder Ejecutivo presentó una propuesta que reconoce uno de los reclamos de los trabajadores: el cobro de un correctivo de 5,66% pendiente del convenio anterior. Ayer al mediodía, María Flores, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Rurales, anunció que de tarde se votaría el convenio y manifestó conformidad con “no ser el único grupo que quedara excluido del 5,66%”. Dejó claro que “se votará solamente el contexto salarial; nosotros dejamos varios puntos [...] con tal de negociar el salario”, y que los empresarios no hicieron contrapropuestas.
Pero el convenio no se votó. César Rodríguez, del Sindicato de Peones de Estancia, dijo a la diaria que “la patronal se retiró de la mesa de negociación” luego de pedir que quedara en el acta su fundamentación en contra de la propuesta del Ejecutivo, pese a que en la ronda pasada el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social había explicado que eso no era posible, porque se requería una nota aparte.
La patronal está representada por la Asociación de Cultivadores de Arroz, la Asociación Rural del Uruguay, la Federación Rural y la Asociación Nacional de Productores de Leche.
El Ejecutivo sacará un decreto con el convenio, anunció Rodríguez. La propuesta ubica al sector arrocero como “en problemas” (tal como pedía la patronal) y tendrá los ajustes más bajos, mientras que tambos y ganaderos son considerados de crecimiento intermedio.