Los guardavidas que conforman la Agrupación de Guardavidas de Maldonado (AGM) advierten que actualmente es “imposible” brindar el servicio y reclaman mejoras en las condiciones laborales. El principal problema que enfrentan es el del lugar de trabajo: “No sólo es la falta de agua, baños, protectores, ropa adecuada y material para el rescate”; a eso ahora se suman las “pésimas condiciones” de las casetas, que “significan un riesgo inminente para la vida de los trabajadores y de los bañistas”. El delegado de la AGM Diego Chiazzaro aseguró que el alto riesgo quedó en evidencia el miércoles, cuando un viento azotó la costa que va desde Punta del Este hasta el puente de la Barra y destruyó ocho casetas; “no pasó nada porque los guardavidas se habían ido antes, si no hubiera sido un desastre”. La Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Maldonado, a la que desde este año pertenece AGM, presentó una denuncia ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social por violación a la Ley de Responsabilidad Penal del Empleador; la Inspección General del Trabajo inspeccionará hoy las casetas.

El director general de Deportes de la Intendencia de Maldonado, Martín Laventure, aseguró que “no hay ningún problema” con los contratos laborales de los guardavidas, y explicó que las “dificultades” se dieron a raíz de la demora en el llamado a licitación para la construcción de las casetas, que causó que la adjudicación fuera recién el 27 de noviembre, con unos diez días para terminar las 84 casetas. A eso se sumó el incumplimiento de la empresa ganadora, que luego de adjudicado el pliego advirtió que no podría cumplir. Se dio entonces por desierto el llamado y se repartieron los pliegos entre las otras cuatro empresas que se habían presentado. En cuanto a los guardavidas, Laventure dijo que, ante el retraso, se acordó un servicio de emergencia hasta el 15 de diciembre, que consistía en que los trabajadores bajaran a la playa con sombrillas o se refugiaran en los paradores, y trabajaran siete de las diez horas que tenían previsto. El plazo se extendió porque se volvió a incumplir con el plazo de construcción de las casillas. A su vez, los guardavidas señalan que el viento del 14 dejó en evidencia la “precariedad” de las construcciones y el incumplimiento de la normativa de seguridad e higiene laboral.

Entrevero

La licitación también levantó polvareda: la edila frenteamplista Lourdes Ontaneda presentó el martes 6 una denuncia ante la Junta Departamental de Maldonado (JDM) que llevó a que este jueves se conformara una comisión investigadora. Ontaneda asegura que de las cinco empresas que se presentaron a la licitación, sólo una cumplía con las condiciones necesarias para construir las casetas; afirma que las demás han incumplido con la Intendencia de Maldonado y otras intendencias, que tienen “problemas” con el Banco de Previsión Social y la Dirección General Impositiva, e incluso dijo que algunas no están inscriptas en el RUPE y aun así se les adjudicó la construcción.