Para estacionar la bicicleta uno puede encadenarla al poste de Pare o a la reja de un comercio fundido. También puede ingresarla al trabajo o a la casa de un vecino, aunque esto requiera un esfuerzo extra y muchas veces no haya un espacio destinado a ese fin. A esto hay que sumarle que es riesgoso dejar la bicicleta en la calle. En este contexto, la Intendencia de Montevideo (IM) envió a la Junta Departamental -luego de reunirse con las organizaciones Urubike, Unibici, Ciclovida y Liberá tu Bicicleta- un proyecto de decreto para que haya estacionamientos de bicicletas en toda la ciudad. La iniciativa se enmarca en el concepto de movilidad sustentable, según se afirma en la página web de la comuna, y los ediles comenzarán a discutirla el 18 de febrero, cuando termine el período de receso.

El proyecto dispone que, por un lado, los organismos públicos deberán ofrecer una zona de estacionamiento para bicicletas, tanto para sus funcionarios como para el público en general. Todas las oficinas disponen del plazo de un año -a partir de la reglamentación- para su instalación. De lo contrario, serán sancionadas cada mes con multas de 8 UR (a la fecha, 6.779 pesos). “Es un valor simbólico”, dijo a la diaria la edila del Frente Amplio (FA) Graciela Villar, quien entiende que al no existir un fin recaudatorio y tratarse de un proyecto con “consenso generalizado”, no va a ser necesario llegar al punto de la sanción económica.

Por otro lado, los estacionamientos privados se verán obligados a disponer de lugares para dejar bicicletas. “Si vos tenés un parking de 100 plazas necesitás un espacio para 20 bicicletas”, explicó a la diaria el director de la Unidad Ejecutiva del Plan de Movilidad de la IM, Gustavo Arbiza. La proporción de cinco a uno será igual para todos los establecimientos, y quien deje su bicicleta deberá abonar como máximo 10% de la tarifa de vehículos motorizados. Los vehículos que circulen por áreas determinadas para las bicicletas serán multados con 4 UR (3.390 pesos) y en el caso de estacionar en lugares para bicicletas la sanción será de 2 UR (1.695 pesos).

Villar estimó que no habrá grandes disputas en relación con este proyecto, aunque le “preocupan mucho” los estacionamientos en la Ciudad Vieja, ya que son muchos y no será fácil lograr que todos cumplan con el decreto. “La información del costo del servicio deberá estar en lugar visible en el establecimiento”, se establece en el proyecto.

La Junta Departamental se encuentra en receso hasta el 18 de febrero. De todas formas, la diaria consultó a ediles del FA y de la oposición para conocer su impresión sobre este primer boceto enviado por la comuna. Tanto el edil del FA Pablo Aldaya, presidente de la comisión de Movilidad Urbana, como el edil del Partido Nacional (PN) Diego Rodríguez, vicepresidente de dicha comisión, desconocen el proyecto de decreto y sólo están al tanto de algunos titulares que ojearon en la prensa. En los próximos días, señalaron ambos, estarán interiorizados en la iniciativa.

En un taller dirigido a los ciclistas que tuvo lugar en 2009 en el Centro de Desarrollo Económico Local de Casavalle, la organización Urubike (creada en 2004 por un grupo de usuarios de bicicletas) presentó un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias Sociales sobre el uso de la bicicleta. La investigación reveló que 14% de los montevideanos (105.752 personas) utilizan el birrodado, aunque sea de vez en cuando, mientras que 10% son usuarios habituales. 62% de los usuarios son hombres y tienen entre 28 y 51 años.