El presidente Tabaré Vázquez fue tajante el martes, durante la cadena nacional de radio y televisión en la que hizo un balance del primer año de su gobierno, al afirmar que no modificarán los lineamientos salariales propuestos por el gobierno al inicio de la sexta ronda de negociación colectiva, a mediados del año pasado. Es que después de que se conociera, a comienzos de 2016, que en 2015 la inflación alcanzó 9,44% y que el salario real creció 1,56% respecto de 2015 (el gobierno estimaba un crecimiento de 2,5%), desde el PIT-CNT se insistió en que debían cambiarse los lineamientos previstos por el Poder Ejecutivo.

En la cadena, Vázquez explicó: “A los efectos de evitar un mayor impacto negativo sobre el empleo, se requiere mantener los lineamientos salariales diseñados en 2015, especialmente en lo relativo a evitar los mecanismos automáticos de retroalimentación entre precios y salarios como un elemento más para disminuir las presiones inflacionarias, ya que, como hemos dicho, la inflación castiga más a los sectores de ingresos fijos”.

Fernando Pereira, presidente del PIT-CNT, también fue claro ayer al interpretar que el de Vázquez fue “el anuncio de un conflicto”, según dijo temprano, entrevistado en No toquen nada. En diálogo con la diaria, el dirigente aseguró que cayó “muy mal dentro del movimiento sindical”, más teniendo en cuenta que los últimos gestos del gobierno daban a entender que las pautas salariales “podían estar evaluándose en el gabinete”. A mediados de febrero, el director nacional de Trabajo, Juan Castillo, informó que se había pedido un informe técnico para estudiar eventuales cambios en los lineamientos.

Las pautas salariales establecen aumentos anuales, para los sectores dinámicos, de hasta 10% en el primer año, 9% en el segundo y 8% en el tercero; para los sectores intermedios, de 8,5% en el primer año y decrecientes en los dos siguientes, y para los sectores “en problemas”, de 7,5% el primer año y decrecientes en los sucesivos. En la etapa de negociación que comenzó en enero, los aumentos máximos ya son los correspondientes al segundo año, por lo que el mayor aumento habilitado por el gobierno es de 9%, lo que para el PIT-CNT amenaza el poder de compra, dado que la inflación se mantuvo por encima de 9%.

“Parece claro que con estos datos de inflación es muy difícil alcanzar acuerdos en el marco de los nuevos lineamientos, donde la mayoría de los grupos de negociación tienden a ubicarse en el sector medio, que contiene ajustes semestrales de 4,25%. Esto implica percibir aumentos anuales (y por todo concepto) por debajo de la inflación (un punto aproximadamente), sin crecimiento adicional y con correctivos que en el mejor de los casos se implementan cada 18 meses”, establece un documento elaborado por el Instituto Cuesta Duarte. Pereira graficó: “Con estas pautas que reafirmó el presidente, en algunos casos se va a poder mantener el salario y en otros casos se va a perder poder de compra”. El dirigente de la central dijo además que los datos de 2015 indican que el salario “no es el principal componente inflacionario”, en respuesta al argumento de Vázquez. El salario real creció 1,56% respecto de 2014, más bajo que el que se venía registrando en la década anterior, de 3% anual en promedio; no obstante, pese al menor aumento del salario real, la inflación llegó a 9,44%. Mencionó que hay 500.000 personas que ganan menos de 12.000 pesos líquidos, para quienes “habría que tener políticas diferenciales y fuertes, porque todos sabemos que con ese salario no se puede vivir”. Valoró el crecimiento salarial de la última década, pero consideró que, en “un país con desaceleración, la gran puja es si se logra quitar una parte de la ganancia de parte del sector empresarial para que una parte de los trabajadores viva un poco mejor”. Puso como ejemplo claro de la situación el sector gastronómico y hotelero: “Todos reconocen que tuvieron ganancias importantes esta temporada. Un hotel cinco estrellas cobra 250 dólares la habitación, pero a sus trabajadores les paga 11.500 pesos de salario”.

Ayer, los dirigentes del PIT-CNT conversaron sobre el tema y resolvieron que hoy pedirán una entrevista con Vázquez. Este año negociarán sus convenios los sectores de trabajo doméstico, forestal, una parte del sector rural y el de comercio y servicios, “un sector con cantidades muy grandes de trabajadores con bajos salarios”. Pereira confió en que se generen las condiciones de diálogo, que “siempre hemos tenido con el presidente”, para al menos lograr algunos cambios en los lineamientos, o uno en particular: que haya correctivos anuales por inflación, ya que las pautas actuales establecen que los correctivos son a los dos años del convenio (o, en el mejor de los casos, a 18 meses).