La Intendencia de Montevideo (IM) se pronunció públicamente ayer sobre los últimos incidentes entre taximetristas y la empresa Uber. Mediante un comunicado, la IM “rechaza” el funcionamiento de la empresa internacional por estar “por fuera del orden jurídico departamental y nacional”. Según la comuna, a pesar de esta situación, la empresa “no ha demostrado voluntad de diálogo con previa suspensión del servicio”. Si bien aclara que Uber usa una aplicación electrónica, la IM señala que eso deriva “en un servicio de transporte de pasajeros que tiene regulación específica”.

En el comunicado, la IM también se refiere a los últimos incidentes protagonizados por un chofer de Uber y un taxista, que terminó en el procesamiento sin prisión de este último por el delito de justicia por mano propia. La comuna anunció al respecto que “está en procura de individualizar al conductor que habría admitido trabajar para Uber, para iniciar el proceso sancionatorio que corresponda”. Además, expresó la “preocupación” por solucionar la situación que se generó a causa del comienzo de las operaciones de la empresa en Montevideo, y en relación a los distintos planteos que ha realizado la Gremial Única del Taxi, aclaró que “corresponden a diferentes organismos que no integran la órbita del gobierno departamental”.

Además, la IM dice que ya trasladó el tema al Congreso de Intendentes; también realizó gestiones con el gobierno nacional para abordar el tema globalmente, y destaca que actualmente se estudia en el Parlamento un proyecto de ley para regular las aplicaciones informáticas como Uber. “Como intendencia estamos a disposición del Poder Legislativo para brindar los aportes que sean requeridos”, cierra el comunicado.