La inflación estimada por el Instituto Nacional de Estadística para marzo fue de 1,04%, bastante más que la alcanzada en igual mes del año anterior (0,7%) y, por ende, suficiente para que el acumulado en los últimos 12 meses esté por encima de la temida “barrera psicológica” de 10%. En el acumulado interanual el aumento de precios alcanzó 10,6%. Los rubros que más pesaron son los de bebidas alcohólicas (22,44%), bienes y servicios diversos (13,26%), educación (12,55%) y transporte (11,82%).

En marzo, los rubros de mayor alza fueron los que incluyen muebles, artículos y productos para el hogar (1,85%), y se destaca el aumento salarial correspondiente al servicio doméstico (2,79%). En menor medida, pero con incidencia mayor, aumentaron los alimentos y bebidas no alcohólicas (1,44%). En esta rama, los aumentos mayores se registraron en los precios de lechugas (16,94%), limones (11,44%) y huevos (7,56%). En el rubro panes y cereales (el de mayor aumento en febrero), se moderó el incremento de precios. Los mercados de panes envasados, pulpa de tomates, aceite y arroz son los primeros que estudia el Área de Defensa a la Competencia del Ministerio de Economía y Finanzas, para controlar el aumento de precios. El grupo catalogado como “bienes y servicios diversos” fue uno de los que más contribuyeron a la inflación en marzo, con un alza en los precios de 1,32% en general, fundamentalmente por salones de peluquería y establecimientos de cuidado personal (1,19%), artículos para la higiene personal (2,14%) y otros productos para el cuidado personal (2,39%).

Los precios del transporte se vieron afectados por la suba de los boletos de ómnibus locales (4,98%), suburbanos (4,59%) e interdepartamentales (3,74%).