El Mercosur quedará acéfalo en los hechos este sábado, cuando Uruguay presente el informe final de su presidencia pro témpore. La negativa de Brasil y Paraguay a traspasarle la presidencia a Venezuela, contrariando la normativa interna del bloque, y su rechazo a participar en la reunión del Consejo del Mercado Común (CMC) del Mercosur que Uruguay había convocado para mañana, determinarán una situación inédita en la región. Venezuela entiende que el traspaso de la presidencia a su gobierno es automático al presentar el gobierno uruguayo su informe final y manifestar que no seguirá ejerciendo ese rol. Sin embargo, ni Brasil ni Paraguay reconocen la conducción de Venezuela y entienden que esta es legítima sólo en la medida en que exista consenso entre los integrantes del Mercosur y se realice un acto formal de traspaso. Por lo tanto, lo único cierto es que Uruguay seguirá encabezando las negociaciones del bloque con la Unión Europea, pero cómo se procesará el resto de las decisiones en el Mercosur es todavía una incógnita.