El presidente Tabaré Vázquez participó ayer en la ceremonia de ascenso de Luis de León al grado de brigadier general de la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU). En el acto también estuvieron el ministro de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro, el subsecretario de esa cartera, Jorge Menéndez, y el comandante en Jefe de la FAU, Alberto Zanelli. El comandante anunció que la FAU realizará “tareas de reconocimiento” en la frontera con Brasil durante los Juegos Olímpicos que se llevarán a cabo en Río de Janeiro desde el 5 de agosto. En declaraciones a la Secretaría de Presidencia, Zanelli explicó que van a “empeñar aviones livianos y aviones medianos con diferentes tipos de sensores: de visión infrarroja, cámaras multiespectrales”, que “van a permitir actuar en diferentes condiciones meteorológicas”. “Estamos vigilantes, que sepan que estamos allí, que van a tener las consecuencias”, advirtió el militar aviador. Después, en rueda de prensa, Zanelli aprovechó para reclamar recursos: “Tenemos aviones que son más viejos que yo, lo cual es decir un montón. Vamos a volar los aviones hasta que podamos extraerles el máximo rendimiento, pero hay cosas que exceden nuestra capacidad”. El comandante en jefe de la FAU puso como ejemplo los aviones Pucará, cuya fábrica ya no produce ni motores ni partes.