La Suprema Corte de Justicia (SCJ) ordenó ayer que se continúe con la indagatoria penal sobre la muerte del militante comunista Nuble Yic, detenido por las Fuerzas Conjuntas en su casa, en octubre de 1975, y fallecido en marzo del año siguiente, según informó ayer el portal del semanario Caras y Caretas. El caso se había archivado en 2009, pero la jueza Beatriz Larrieu, que está a cargo del Juzgado Penal de 7º Turno, lo reabrió en 2011.

Obrero de frigorífico, Yic también distribuía ejemplares de El Popular, órgano de prensa del Partido Comunista, a fines de los años 60. Se sabe que había tenido problemas cardíacos y que murió de un ataque mientras estaba preso; según la denuncia del Observatorio Luz Ibarburu, falleció “por las severas sesiones de tortura y las malas condiciones de reclusión”.

Para la SCJ no cabe “computar el período de vigencia de la Ley de Caducidad”. Según el portal, Jorge Larrieux y Jorge Chediak votaron a favor de la prescripción del delito, y María Elena Martínez, Ricardo Pérez Manrique y Felipe Hounie votaron en contra.