El comandante en jefe de la Armada, Leonardo Alonso, dijo el lunes en la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Representantes que la capacidad actual del Estado, por intermedio de la Armada, para ejercer el control de sus aguas jurisdiccionales “es crítica, al límite de su cumplimiento”. Según consta en la versión taquigráfica, Alonso apuntó que esta situación “se agrava a la hora de actuar eficientemente y eficazmente en el cumplimiento de las obligaciones que el Estado tiene en materia de búsqueda, rescate y asistencia en el mar”.
El militar afirmó que la prospección y explotación offshore “aumentan las posibilidades” de que surjan amenazas y que “la capacidad militar de las unidades de la Armada es prácticamente nula”. Terminó su discurso leyendo una frase del capitán de navío Francisco Miranda, que hace referencia a que por “la falta de algunos buques”, se limita la soberanía del país.
El ministro de Defensa Nacional, Jorge Menéndez, quien compareció a la comisión en la misma instancia, no contradijo las afirmaciones de Alonso, al menos en la versión pública de la sesión -una parte de esta fue excluida de la versión taquigráfica porque el ministro solicitó reserva-. Respecto del presupuesto destinado a la cartera, Menéndez explicó que representa 3,7% del gasto público total, lo que supone menos de 1% del gasto en comparación con el Producto Interno Bruto (PIB). “Si desagregamos esa cifra, un 72% se destina a salarios y cargas sociales, un 23% a funcionamiento y un 5% a inversiones”, detalló el ministro. “Obviamente, esto no es lo deseable, porque pensamos que ese 72% que se va en salarios y cargas sociales tendría que tener un correlato mucho mayor para las inversiones”, agregó.
Por otra parte, Menéndez dijo que el proyecto de ley que reforma el sistema de retiros y pensiones militares todavía no está elaborado. “En el gobierno nacional existe el concepto de que debe reformarse el servicio de retiros de las Fuerzas Armadas, de que va a ser bueno para ellas contar con un servicio de retiros modificado, aggiornado, moderno y en coordinación con lo que ha sido hasta el momento la reforma del sistema previsional de todos los uruguayos en las distintas áreas”, señaló el ministro. Aclaró que la idea del gobierno es “que las reformas se hagan con un criterio inclusivo, que no signifiquen castigo, sino modificaciones de inequidades en algunos casos y, en otros, de cuestiones que se deben cambiar”. “No existe aún un proyecto definitivo; se está trabajando en ello, y en esta tarea está involucrada gente del propio servicio de retiros y de los tres comandos”, manifestó.