En contra del recorte del gasto educativo en el presupuesto y a raíz del conflicto actual en secundaria, varios sindicatos de la educación plantean hacer un paro de 24 horas los últimos días de agosto. Así lo propusieron a la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay la Asociación de Funcionarios de UTU, la Agremiación de Funcionarios de la Universidad de la República, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza Privada y la Unión de Funcionarios del Codicen. Hacia esa resolución se encamina también la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), que el sábado tendrá una Asamblea Nacional de Delegados para terminar de definir su postura. La Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria, el otro gremio importante de la educación, está realizando consultas en sus filiales y todavía no ha resuelto su posición.

Ayer la asamblea de la Asociación de Docentes de Enseñanza Secundaria (ADES) de Montevideo definió apoyar el paro de 24 horas y realizar una movilización, aunque todavía no se definió de qué características. Emiliano Mandacen, dirigente de ADES, consideró que los 692 millones de pesos que el actual proyecto de ley de Rendición de Cuentas abate del presupuesto de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) afectarían “la creación de cargos, lo que nos preocupa muchísimo, porque implicaría la reducción de grupos y la superpoblación de otros grupos”.

Mandacen, además, hizo referencia a la situación de “tensión” que se vive actualmente entre Fenapes y el Consejo de Educación Secundaria (CES) y el Consejo Directivo Central (Codicen) de la ANEP, que ha llevado al sindicato a retirarse de los ámbitos de negociación colectiva. Fenapes afirma que se tomó esa decisión “ante la falta de garantías y la serie de incumplimientos, violaciones y desconocimientos”, por parte del Codicen, de las leyes de Negociación Colectiva y de Libertades Sindicales. En la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados denunciaron un caso en el que las actividades gremiales se convirtieron “en un elemento importante de valoración en la carrera funcional, en el que a texto expreso la dirección del centro educativo decía que se bajaba el puntaje a una docente producto de su actividad sindical”, planteó el secretario general de Fenapes, José Olivera. Además, los docentes agremiados afirman que se viola el Estatuto del Funcionario Docente, y citan el acta de una reunión entre el presidente del Codicen, Wilson Netto, y los integrantes del CES, en la que Netto afirma que los docentes no pueden justificar la inasistencia a clases por participar en las reuniones de profesores ni por “temas sindicales”.

Para revertir la actual ruptura entre las autoridades y el gremio se generó otro ámbito de intercambio, cuya primera reunión tendrá lugar el viernes de tarde. Mandacen confirmó que ayer la Comisión de Legislación del Trabajo citó a Fenapes, al Codicen y al CES para participar en dicho ámbito. “Saludamos la premura con la que se movió la comisión, que una semana después de la exposición de Fenapes convocó a este ámbito”, valoró el dirigente sindical, que a los reclamos ya realizados sobre la violación de las leyes de Negociación Colectiva y de Libertades Sindicales sumó el planteo de que “se nos consulte sobre las políticas educativas a elaborar”.