Seguramente la propuesta más concreta y, a la vez, más sencilla, sea la del ex candidato a la Intendencia de Montevideo por el Partido de la Concertación Edgardo Novick de juntar a todos los partidos bajo un mismo lema, con la finalidad de derrocar al FA en las próximas elecciones nacionales. Sin embargo, por cuestiones de forma y de fondo, la idea no genera adhesiones en ninguno de los restantes partidos de la oposición, y no parece tener chances de prosperar. Esta propuesta, dijo el senador nacionalista Jorge Saravia (Todos), “no tiene cabida ni asidero”: “Los partidos tienen sus contenidos ideológicos y perfiles. Son fuertes, y esto debilitaría las estructuras partidarias. A diferencia de Argentina, acá los partidos funcionan como tales, más allá de los acuerdos. En octubre se define quién sale primero y segundo, y en noviembre el presidente; eso no lo cambia nadie”.
El diputado colorado Conrado Rodríguez, del sector Espacio Abierto, en tanto, entendió que la propuesta de Novick “no es algo positivo”. “Es notorio que [en los partidos tradicionales] existen identidades diferentes, historias diferentes, y además es bueno tener matices, para poder nutrir de mejor manera a un arco opositor. No somos iguales, y eso es una realidad histórica”. Además, agregó, la existencia del balotaje hace innecesario que exista una unidad partidaria a tales efectos.
Tampoco el Partido Independiente (PI) mostró coincidencia con esta iniciativa. “Las propuestas que impliquen ‘todos contra el FA’ o una gran coalición opositora no cuentan con nuestro apoyo. No existe la oposición, sino las oposiciones. Nosotros coincidimos con una parte de la oposición y también con una parte del gobierno”, dijo el senador Pablo Mieres.
Programático pero no electoral
Con la idea de adelantar el posible escenario electoral de un eventual balotaje en 2019, el senador Jorge Larrañaga, líder de Alianza Nacional (AN), está convocando a la oposición a trabajar en una serie de acuerdos programáticos comunes. Según dijo dos semanas atrás, es necesario que en el arco opositor se genere un “esfuerzo de coordinación”, dado que “ningún partido va a tener mayorías parlamentarias, y eso va a requerir coincidencias más allá de las identidades partidarias”. Guillermo Besozzi, senador de AN, expresó que “a quien le toque gobernar debe tener los grandes lineamientos, y si bien este pedido lo ha liderado [Jorge] Larrañaga, creemos que el resto del sistema político debe pensar medianamente parecido”. El líder de AN había explicado que lo que se busca es “hacer un esquema en el que haya grandes coincidencias en los partidos de la oposición sobre temas puntuales que importan a la vida de los uruguayos”.
En Todos hacia Adelante, el sector mayoritario del PN, existe cierta aceptación de esta idea, aunque marcando matices. “Coincidimos en que hay que coordinar en los temas de política nacional con los otros sectores que pueden estar afines dentro de la oposición, pero entendemos que el PN está preparado para gobernar”, dijo Saravia, respondiendo así los dichos de Larrañaga el 21 de agosto a VTV, cuando sostuvo que la oposición aún no estaba preparada para gobernar. Justamente, en esa oportunidad Larrañaga argumentó explicando la necesidad de construir una agenda común de la oposición.
A título personal, Rodríguez coincidió con la propuesta de Larrañaga: “Llegar a determinados acuerdos en ciertos temas y que lo pueda hacer la oposición en conjunto creo que es algo bueno. La instancia de balotaje implica muy poco tiempo para llegar a acuerdos”. Se trata, sostuvo, de “buscar acuerdos puntuales, y hacerlo con tiempo”. Mieres, en cambio, no compartió esa postura: “Nosotros estamos trabajando para una propuesta con expresión electoral, y esto, interpreto, es una coordinación programática para una eventual segunda vuelta”.
La revolución socialdemócrata
Tanto Espacio Abierto como el Partido Independiente vienen llevando adelante una serie de eventos bajo el concepto de “la agenda socialdemócrata”, aunque esta coordinación, explicaron desde ambas colectividades, no implica ningún tipo de alianza político-partidaria.
Rodríguez expresó que lo que su sector busca es “hacer cosas en conjunto, en la medida en que podamos buscar coincidencias programáticas de cara a un futuro gobierno; nos parece importante conformar determinadas políticas públicas en temas que son trascendentes para el país”.
A pesar de esta iniciativa, Rodríguez descartó que vayan a apostar a una expresión electoral nueva, y dejó en claro que su sector “está dentro del Partido Colorado, y vamos a pelear en esa interna para que el batllismo sea la mayoría allí”.
Diferente es la posición del PI. “La idea nuestra es construir una alternativa con expresión político-electoral que incluya gente de diferentes grupos que hoy están en otros partidos”, explicó Mieres. El legislador admitió que “hay conversaciones” con dirigentes del FA, del PN y del PC, pero ninguna de ellas se puede hacer pública “sin afectar un ámbito de confianza”. “Estamos planteando la posibilidad de un acuerdo político electoral con gente que pertenece a distintos partidos. El modelo es posible y consiste en integrar un lema y formar varias listas”, dijo, aclarando también que, sin embargo, el PI no se integrará a un partido ya existente. “El PI, de última, va a aparecer independiente, pero nos parece que hay que integrar una opción con más chance de disputar el gobierno. El PI solo no lo logra, y en los otros tres partidos hay gente con la que tenemos reales sintonías, aunque, paradójicamente, ellos terminan votando con otros, con los que no tienen sintonía”.