La agrupación Aparicio Saravia de Lavalleja, que orienta el diputado nacionalista de ese departamento, Mario García, le quitó el respaldo político a la intendenta Adriana Peña y retiró a sus dirigentes del gabinete de la comuna, incluido el secretario general, Alejandro Giorello.

Tanto García como Peña pertenecen al sector del Partido Nacional (PN) liderado por el senador Jorge Larrañaga. Esta proximidad, sin embargo, no impidió que afloraran las diferencias entre la máxima autoridad departamental de Lavalleja y el legislador local.

En diálogo con la diaria, García expresó que si bien su agrupación retiró “el apoyo político de la gestión directa”, en la Junta Departamental “seguiremos trabajando y apoyando las cosas buenas que entendemos que hay que apoyar”. Según dijo, en esta gestión de Peña -su segunda consecutiva- “son varias cosas” que se han acumulado y que llevaron a que su agrupación retire el apoyo político, aunque el legislador no quiso especificar detalles. “No es una gestión igual a la anterior. No hay un rumbo establecido”, se limitó a declarar.

Ayer García acompañó a Giorello en una conferencia de prensa en la que el ex jerarca dio a conocer los motivos de su renuncia, aunque no profundizó mucho más que el diputado. “No nos hemos sentido respaldados en acciones que se han llevado adelante últimamente por parte de la doctora Adriana Peña”, sostuvo. Luego de justificar por qué había apoyado la reelección de la intendenta (en el entendido de que “había hecho una buena gestión, donde había un rumbo, una planificación”), expresó que, en los últimos tiempos, “vimos que este primer año de su segundo gobierno no tiene nada que ver con la planificación, con lo que había hace cinco años”. “No sabemos qué le pasa a la doctora Peña”, remató.

La semana pasada el diario El País publicó la noticia de que Peña venía llevando adelante reuniones con otros cuatro intendentes nacionalistas: Eber da Rosa (Tacuarembó), Sergio Botana (Cerro Largo), Enrique Antía (Maldonado) y Dardo Sánchez (Treinta y Tres), con miras a la conformación de un nuevo sector político dentro del PN. Frente a estos trascendidos, la intendenta no ocultó el hecho de que había mantenido reuniones con otros jefes comunales, pero negó cualquier fin electoral. “¿A alguien le parece que es el momento indicado para hablar de política partidaria y electoral?, ¿de hablar de candidaturas? A mí no!”, escribió en su cuenta de Facebook. En ese mismo posteo explicó: “un grupo de Intendentes nos hemos venido reuniendo para buscar soluciones a temas que nos son comunes, para intentar atraer por todos los medios a nuestro alcance, inversiones para los respectivos departamentos y de esta manera aumentar la oferta de trabajo de nuestros vecinos”.