La figura política del empresario Edgardo Novick, impulsada por blancos y colorados para competir dentro del Partido de la Concertación con el Frente Amplio en Montevideo, hasta ahora ha estorbado mucho más a los partidos tradicionales que al oficialismo. Lo ocurrido ayer supone un nuevo capítulo en ese proceso.

¿Por qué? Porque hasta el momento Novick se había nutrido casi exclusivamente de figuras del Partido Colorado (PC). Pero la nueva incorporación que Novick concretó ayer invadió directamente la bancada de diputados del Partido Nacional (PN), e incluso al Honorable Directorio. Daniel Peña integraba el órgano ejecutivo de la colectividad política. Y no se fue solo, sino acompañado por algunos de sus ediles departamentales de Canelones y por el alcalde de la localidad de Soca, según consigna Radio Uruguay.

En la conferencia en que se anunció el pase también estuvo presente el economista y ex candidato a la Intendencia de Montevideo en 2010 Javier de Haedo, quien oficializó así su trabajo con el sector político encabezado por Novick. “Ya sabíamos que estaba con él desde hace tiempo, pero lo de ayer fue un camiseteo de Novick, una forma de mostrar todos los apoyos blancos que obtuvo”, dijo un legislador nacionalista.

Sorpresivo

La sorpresa entre los legisladores nacionalistas fue total. El coordinador de esa bancada en Diputados, Jorge Gandini, dijo haberse enterado del alejamiento de Peña del PN “una hora antes” de que se realizara la conferencia. “La carta no expresa ninguna razón, más que decir con amabilidad que va a recorrer un nuevo camino. Tampoco hubo elementos previos de diferencias en la bancada, más allá de que Daniel asistía poco y participaba poco. Fue sorpresiva esa decisión, que no admitió intermediaciones”, describió el diputado.

Otros diputados del partido dijeron que se sabía que el legislador estaba en camino de alejarse de su sector, Alianza Nacional, aunque nunca imaginaron que Peña iba a irse del partido. Tampoco es probable que el PN le pida la banca, porque sería “agrandar el problema”. “Fue militante de toda la vida, aunque en los últimos tiempos, y sobre todo en esta legislatura, nunca se integró totalmente a la cámara. Había tenido pretensiones de ser presidente de Diputados en 2018, pero no tuvo mucho apoyo en la interna”, describieron.

Gonzalo Baroni, presidente de la juventud del PN, sostuvo que es una “tristeza” que “abandone nuestras tiendas” y recordó que “siempre fue buen compañero”, aunque “últimamente no estaba yendo mucho al Directorio”. Según dijo, se tomó este alejamiento “sin rencores”. “Las personas son racionales. Él debe de haber hecho una evaluación de su futuro político”, sostuvo.

El avance de Novick a costa de dirigentes blancos y colorados es observado “con atención” en filas nacionalistas, señaló Gandini. “Hay tres legisladores que se van de sus partidos y no se sabe a dónde, porque Novick no constituye una bancada porque no tiene un partido. Son señales que hay que atender, y cada uno debe hacerse cargo de responderle a la gente que nos eligió. El sistema es sólido y los partidos estables, porque la base es que la gente vota a un partido y luego a las listas de sus representantes. Cada uno se hará cargo de cómo da cuenta de sus valores y principios”, expresó.

En tanto, Baroni aprovechó para matizar el daño que Novick les viene haciendo a los partidos tradicionales: “Generalmente son dirigentes del PN o del PC que, o bien fueron derrotados en las internas, o han tenido algún traspié con otros dirigentes. No hay ninguno de primera línea”. El diputado Pablo Abdala escribió en Twitter: “'La cáscara es lo que se va. El cerno queda'. Gral. Aparicio Saravia”.

El anuncio

Sentado junto a De Haedo y Peña, Novick encabezó ayer una conferencia de prensa en la que se anunció la incorporación del legislador nacionalista. Aunque la composición de la mesa ya lo decía todo, el propio Peña se encargó de verbalizar lo evidente: “Es un momento por una parte duro y triste a la vez. Estoy anunciando mi alejamiento del PN, la colectividad que abracé con el alma cuando tenía apenas 13 años”, sostuvo. Sin embargo, también dijo que se trata de “un momento de profunda esperanza”, ya que se da el “comienzo de un nuevo rumbo de mi vida política”: “Es el camino que me dicta la conciencia, la responsabilidad y el compromiso con la gente. El camino es escuchar a la gente”. Luego insistió con “la gente” y con estar cerca de ella “y de los trabajadores, como Wilson nos enseñó”, ya que “por encima de los partidos está la gente”. “Muchos blancos vamos a juntarnos a este movimiento que no tiene barreras partidarias”, finalizó.

Le siguió De Haedo, que recordó que ambos habían sido candidatos a la intendencia por sus respectivos departamentos, Montevideo y Canelones, en 2010. El ex director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto en el gobierno de Luis Alberto Lacalle subrayó la “extensa tarea parlamentaria” de Peña y que posee “un caudal de votos de los mayores del país”.

El último en hablar fue Novick, quien destacó la importancia de contar con estas dos personas “tan importantes en la vida política de Uruguay”. Según dijo, en sus recorridas por los barrios de Canelones “la gente me hablaba de los valores del diputado Daniel Peña”. “¿Cómo no vamos a coincidir, si los dos venimos de familia humilde, los dos fuimos a escuela y liceo público, y los dos venimos de abajo, yo de la feria y él vendiendo diarios?”, se preguntó. Según el ex candidato a la Intendencia de Montevideo, en su nuevo sector político “todos somos gente de trabajo, y ese es el Uruguay que queremos recuperar. Ayer fueron colorados, hoy son blancos y mañana serán frenteamplistas; todos mantienen su camiseta, pero se van a poner por encima la de Uruguay, porque la gente quiere que estemos todos juntos”.

Luchas de antaño

“Nunca me espero algo así de nadie. La psiquis de esta gente no sé si se puede comprender”. La frase es del senador Luis Lacalle Pou y hace referencia a Daniel Peña, pero data de 2007. Y es que los valores de Peña, tan exaltados por Novick, fueron puestos en cuestión en alguna oportunidad por el ex presidenciable nacionalista. En ese año, cuando ambos eran diputados y representaban al departamento de Canelones, el ahora senador acusó a Peña de haber revisado su casilla de correo electrónico de forma ilegítima. Lacalle Pou descubrió la situación luego de ver su bandeja de mensajes enviados. La denuncia del entonces diputado tensó las relaciones en el Directorio y llevó a un verdadero escándalo, que terminó con un pedido de disculpas de Peña a Lacalle Pou para evitar que este último presentara la queja formal ante la Comisión de Ética. La relación entre ambos dirigentes nunca fue nada buena.