La coordinación del Movimiento Estudiantil, en la que participan la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), los gremios de las carreras del Consejo de Formación en Educación y varios gremios de secundaria, organizaron ayer una marcha desde el liceo Bauzá hasta la sede del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública, con dos reivindicaciones: en contra de la criminalización de la protesta, al haberse cumplido un año del desalojo del Codicen, y en contra del recorte al presupuesto para la educación.
Durante la oratoria, los estudiantes recordaron lo que ocurrió el 22 de setiembre de 2015, cuando se aplicó “una medida autoritaria que no había sido implantada desde el pachecato”, en relación al desalojo de la ocupación en el local del Codicen por parte de gremios estudiantiles. Diego Almada, integrante del Centro de Estudiantes del IPA, añadió, en diálogo con la diaria, que se reclama el “desprocesamiento de los compañeros que fueron procesados” y “que se detenga, por parte de la Policía, el hostigamiento y persecución a militantes”.
También manifestó que “se complica cada vez más la promesa del 6%” del Producto Interno Bruto para la educación, y los estudiantes expresaron su preocupación por el Hospital de Clínicas, ya que “podría estar peligrando su funcionamiento a corto plazo”.