Los datos pueden obtenerse de las sucesivas memorias anuales que publica el MTSS año a año. Mientras que en 2005 la Dinatra atendió 304 conflictos colectivos, en 2015 alcanzó a 1.902, lo que supone un crecimiento de 525% durante la década. Como puede apreciarse en la gráfica, en 2016 los conflictos atendidos por la Dinatra bajaron a niveles similares a los de los años 2012 y 2013. Pero, a pesar de esto, funcionarios de esta unidad ejecutora aseguraron que el descenso se debió a que los conflictos durante el último año fueron “más prolongados”, y aseguraron que el año llegó a ser más movido que 2014. El director nacional de Trabajo, Juan Castillo, tuvo una impresión similar. “Sin mirar las estadísticas ni los números, es obvio que en estos últimos dos años se ha profundizado la generalización de conflictos”, dijo al respecto.

Así como crecieron los conflictos, también lo hicieron las audiencias que hizo la Dinatra para atenderlos. De 1.538 reuniones realizadas en 2005 se llegó al pico máximo de 4.185 en 2015, un incremento de 172%. Al igual que con los conflictos, la cifra se redujo en 2016: 3.412 audiencias.

Para Castillo, “los conflictos siempre existieron”, pero “lo que no siempre existió es que con el conflicto se llegara al MTSS, porque normalmente esto se arreglaba en forma bipartita entre empresas y trabajadores, pero ahora cada vez más van al ámbito tripartito y golpean las puertas del ministerio”. Además, aseguró que los conflictos “cada vez más arrancan en su expresión más alta de movilización”. Dijo que la cartera todavía no analizó en profundidad estos datos. No obstante, aseguró que “en nuestro cuerpo están las huellas de todo esto”, ya que en la Dinatra ha llegado a trabajar “12, 13 o 14 horas por día”. Las puertas del MTSS, sostuvo, se llegaron a abrir sábados y domingos para atender conflictos durante los últimos dos años.

La plantilla de la Dinatra, de hecho, no ha registrado un aumento considerable en los últimos años, según revelan los informes anuales que la Oficina Nacional de Servicio Civil presenta junto con las rendiciones de cuentas. Esta unidad ejecutora tenía 87 funcionarios en 2008 y en 2015 llegó a 107. El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, destacó en diálogo con la diaria que “las autoridades de la cartera felizmente han encontrado “un desempeño de los funcionarios superior al que esperábamos hace dos años”, cuando el jerarca fue investido en su cargo. “Reiteradamente los hemos felicitado por su trabajo, sin perjuicio de que todavía se puede mejorar más”, aseguró.

Posibles explicaciones

Para Murro, el aumento de los conflicto atendidos por su cartera se debe al “rol creciente que asume el MTSS en democracia”. Dijo que en épocas de dictadura y autoritarismo, o entre 1990 y 2005, cuando “prácticamente se quiso eliminar la negociación colectiva”, había “menos oportunidades de negociación y libertad sindical”. “Queremos más y mejor negociación en todos los sectores de actividad, pero también hubo gobiernos que querían menos negociación colectiva y menos derechos de los trabajadores. Nosotros, con la misma fuerza, también defendemos los derechos de los empresarios y las empresas”, aseguró.

El presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, atribuye estas cifras a que actualmente hay más sindicatos que en 2005. “Si la afiliación en 2004 era de algo más de 110.000 personas y la actual es de 410.000, esto implica un movimiento capital del movimiento sindical”, lo que significa, además, que ahora existen “empresas y sectores con sindicatos donde antes no había movilización sindical”, con sus respectivas reivindicaciones y búsqueda de mejorar sus circunstancias laborales, “y esto genera conflictividad”, interpretó.

Pereira aseguró que la Dinatra en 2005 era “un cachito de la oficina que ocupa Castillo”. “Este cambio que se podría medir en metros cuadrados se mide también en la construcción de derechos, y si el movimiento sindical logra entrar en más lugares, se va a agrandar más”, afirmó. En estos años, sostuvo el dirigente sindical, la negociación colectiva y el restablecimiento de los Consejos de Salarios significaron que haya “más de 2.000 organizaciones nuevas desde 2005”.

Otras visiones

Como era de esperarse, en el sector empresarial las opiniones son diferentes. Andrés Fostik, integrante del Consejo Directivo de la Cámara de Industrias del Uruguay, se mostró impactado por los números (que “asustan”) y dijo que suponen un “fracaso total de la negociación colectiva”. “De confirmarse esto, lo que estamos viendo es que una mayor y más profunda negociación colectiva y un mayor crecimiento del salario real en un período de una década es sinónimo de mayor conflicto”.

Fostik dijo que si antes, cuando “la gente tenía la mitad de los beneficios para acceder a un salario, había la décima parte de los controles para que los empresarios cumplan con sus obligaciones y no existían las más de 60 normas laborales”, había menos conflictividad que ahora, es porque “algo está mal”.

Para este gremialista, la negociación colectiva debería ofrecer mejores condiciones salariales a los trabajadores y, a cambio, otorgarle el beneficio al empresario de que trabaje en paz. Pero la situación actual no es de extrañar, sostuvo, ya que “las leyes que se hicieron para promover la libertad sindical de alguna forma degeneraron en que eran sólo derechos lo que se adquiría por medio de ellas, y no obligaciones”. Finalmente, reflexionó: “Si a mayor negociación colectiva se genera un aumento disparatado del conflicto, quizá, de haber sido bipartitas [las negociaciones], hubiera sido más fácil que los trabajadores estuvieran más conformes”.

Por su parte, el ex vicepresidente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios y ex asesor de Luis Alberto Lacalle durante la campaña electoral de 2009 Gustavo Licandro dijo, a título personal, que “cuanto más regulado esté el funcionamiento del trabajo, y menos elástico sea, habrá más tensión entre los trabajadores y las empresas”. Aseguró que, al sacarle flexibiliad, “se hace más difícil llegar a acuerdos naturales”. Para Licandro, “gracias a que en 2002 no había negociación tripartita, la situación no fue mucho más crítica de lo que fue”.

Experimentados bomberos

Así como las cifras del MTSS marcan un aumento de los conflictos atendidos por esta cartera, también revelan que la cantidad de acuerdos logrados en su atención fue creciendo en proporción año tras año. En 2005, la Dinatra logró alcanzar acuerdos en 93% de los conflictos que atendió. Esa cifra se incrementó progresivamente con el paso de los años hasta llegar a 98,6% en 2015. En cambio, una cifra que se mantuvo bastante estable con el paso de los años es el porcentaje de los conflictos atendidos por la Dinatra previamente a la adopción de medidas por alguna de las partes. En 2006, 95,4% de los conflictos fue abordado por la Dinatra antes de la existencia de cualquier tipo de medida gremial. En 2013 y 2015, esta cifra se ubicó en 96%.