El director de la Policía Nacional, Mario Layera, espió a políticos y militantes de izquierda y a ciudadanos en democracia. “La gente que nos debería proteger nos espió. Layera y [el difunto ex director Julio] Guarteche nos vigilaron”, aseguró a la diaria el periodista Juan Correa, de Agesor de Soriano, medio que denunció públicamente el espionaje en diversas investigaciones en los últimos años. Ayer el semanario Búsqueda difundió la respuesta de Layera: “Si hay documentos oficiales que lo acrediten no lo voy a negar, lo que sé es que no espié a nadie, siempre realicé las tareas de observación y vigilancia en el marco de la ley y si no que me demuestren lo contrario”.

Correa dijo a la diaria que tienen los documentos que prueban que Layera participó en reuniones de coordinación de espionaje cuando era un joven oficial, y que los harán públicos. También sostuvo que cuentan con documentos y testimonios de ex oficiales de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia -con quienes corroboraron la información- que sostienen que se espió a ciudadanos: “Hay reuniones de vecinos que están documentadas: ‘está Fulanito de tal, Menganito y autos de tal y tal matrícula’. Si eso no es espiar, no sé qué es. La ciudadanía tiene que saber que el que ocupa el cargo más alto de la Policía nos espió”, agregó. Una vez que termine el receso parlamentario, Agesor presentará toda la información ante la comisión investigadora que trata los posibles actos de inteligencia del Estado violatorios de la normativa legal y constitucional, llevados a cabo por personal policial o militar desde 1985 a la fecha.

Según la investigación de Agesor, Layera asistió, en representación de la Jefatura Departamental de Colonia -en la que se desempeñó entre 1983 y 1995-, a una reunión que se llevó a cabo en el Rancho de Piedra, en Mercedes, a la que asistieron policías de varios departamentos. Correa dijo a la diaria que también tienen información que vincula a más jefes departamentales de Policía al espionaje.