Mediante un comunicado emitido ayer, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay informó que, por circular del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA, por sus siglas en portugués) de la República Federativa de Brasil, fechado el 3 de noviembre, el gobierno de ese país restableció “los procedimientos normales para la importación de leche y sus derivados procedentes” de Uruguay.

En tanto, el titular del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Tabaré Aguerre, informó que el viernes “hubo una segunda comunicación del presidente [de Brasil, Michel] Temer con el presidente [Tabaré] Vázquez” y que ahora “se están tramitando las primeras licencias correctamente”, según publicó la Secretaría de Comunicación Institucional de Presidencia.

Aguerre agregó que “unos minutos antes” de esa llamada telefónica, “había terminado una misión de técnicos de Brasil, algunos vinculados al área lechera, otros vinculados al área estadística, que estuvieron durante toda la semana en contacto” con el MGAP y con el Instituto Nacional de la Leche (Inale), pero “también visitaron distintas realidades productivas, tanto industriales como primarias [tambos]”. El ministro aclaró que “no fue una misión de auditoría técnica ni fue una misión de auditoría sanitaria”, sino que “lo que querían [los técnicos de Brasil] era corroborar información estadística”. “Quedó meridianamente claro, como no teníamos ninguna duda, que Uruguay puede demostrar que lo que exporta es lo que produce.

Además, los técnicos quedaron muy sorprendidos del nivel de trazabilidad, no del ganado, sino de la leche, es decir, de los sistemas de registros: el camión que recibe la leche tiene un medidor, se toma una muestra, esa muestra es independiente por productor, se analiza en un laboratorio, se paga por calidad, queda absolutamente todo registrado en el sistema de remisión de leche. Por lo tanto, se fueron muy sorprendidos no sólo con el nivel de información, sino con el avance tecnológico”, afirmó Aguerre. El jerarca dijo que Uruguay, “como en otros rubros”, enfrenta “el desafío de tener que vender 60, 70, 80 y a veces 90% de lo que produce, y eso nos obliga a tener las normas más exigentes a nivel mundial, para poder venderles a los mercados más exigentes”.

Vale recordar que a principios de octubre el titular del MAPA, Blairo Maggi, anunció la suspensión de la importación de productos lácteos uruguayos “hasta que Uruguay consiga mostrar que 100% de la leche que importamos es de origen uruguayo”, en una declaración que dejaba entrever la sospecha de una triangulación comercial, cediendo a la presión de los productores lácteos norteños. El ministro hizo el anuncio tras una reunión con el Frente Parlamentario de la Agropecuaria.

Según datos del Inale, en 2017 Brasil fue el principal destino de las exportaciones de leche en polvo entera (72% del total), leche en polvo descremada (84%) y quesos (35%), y está en los primeros lugares como destino de la manteca.