La Federación de Obreros de la Industria de la Carne y Afines (FOICA) decidió parar hoy miércoles y mañana jueves por el conflicto en el Frigorífico Solís, en Lavalleja. Ariel Jacques, presidente de la FOICA, dijo a la diaria que la empresa llegó ayer a la reunión en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) con “una posición bastante radical”: sólo propuso extender el seguro de paro. La Federación proponía que también se negociara el régimen de licencias, que se retiraran de la mesa los despidos e iniciar una discusión del convenio colectivo en enero. La reunión tripartita estaba citada para las 11.00, pero, al no llegar a un acuerdo, se pasó a cuarto intermedio; los trabajadores esperaron hasta las 14.00, pero no hubo respuesta de la empresa. “Nadie contestó, por lo que se decidió seguir con las medidas”, afirmó Jacques. “La sensación que nos queda es que quieren enterrar a los 68 trabajadores. Tenemos toda una directiva sindical afuera”, sostuvo. El conflicto en el frigorífico de Lavalleja comenzó en el sector faena, cuando los empleados empezaron a trabajar a reglamento, al constatar que cobraban más trabajando por hora que por productividad. Según explicó Jacques, en todos los frigoríficos se cobra más cuando se trabaja más, pero este frigorífico pagaba tan poco por productividad que no era rentable. “Inmediatamente la empresa contestó mandando a todos los afiliados al sindicato al seguro de paro”, dejó a dos personas en faena y trasladó gente de limpieza y mantenimiento a ese sector.

Ayer, el Secretariado del PIT- CNT emitió un comunicado en el que expresó su “más profunda solidaridad” con los trabajadores afiliados a la FOICA y rechazó las “prácticas de represión antisindical, de imposición de ritmos de trabajo, apañadas por la actitud de no intervención de las Cámaras Empresariales del sector”. En el documento, el PIT-CNT sostuvo que la patronal del Frigorífico Solís trata de “imponer unilateralmente ritmos acelerados de producción, violentando las normativas vigentes”, lo que desató “un conflicto generalizado en la industria frigorífica”.

Por su parte, las gremiales rurales expresaron ayer su “preocupación” por el daño que el conflicto “genera a los productores ganaderos, en particular productores chicos y medianos, altamente dependientes de los embarques de ganado a realizarse en zafra”. La Asociación Rural del Uruguay, la Comisión Nacional de Fomento Rural, las Cooperativas Agrarias Federadas y la Federación Rural rechazaron “las posiciones irreflexivas, provengan de donde provengan, las que finalmente determinan tensiones y desconfianzas aun superados los conflictos, socavando el necesario clima de entendimiento que se requiere para encarar la actividad productiva agroexportadora”. Las gremiales aspiran a que la sensatez “permita superar las diferencias, atendiendo las dificultades crecientes que para competir tiene la industria exportadora en nuestro país, a la vez de la necesidad imperiosa de preservar los puestos de trabajo, sustento de tantas familias”.