Ocurrió el martes, después del horario escolar, en la escuela 253 del Cerro de Montevideo. Un hombre ingresó a la escuela por el fondo, que no está vallado, se tiró sobre una de las maestras intentando someterla, y tras pedidos de ayuda de ella y de otra maestra que acudió en ayuda de su colega, el hombre se fue corriendo. La maestra radicó la denuncia policial ese día. El miércoles hubo una reunión en la escuela, en la que participaron los integrantes del Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP), los maestros e integrantes del Secretariado de la Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu) de Montevideo, y ayer hubo una nueva reunión entre integrantes del sindicato, maestros de la escuela y el integrante del CEIP en representación de los docentes, Pablo Caggiani. Hoy las clases se retomarán normalmente.

Tanto Daysi Iglesias, secretaria general de Ademu Montevideo, como Caggiani informaron que el agresor no tiene relación con la escuela. Iglesias aseguró que fue el primer caso de intento de abuso sexual a una maestra que registran, lo consideró un “hecho fortuito” y reafirmó que el agresor está “absolutamente desvinculado” de la comunidad educativa.

El sindicato reclamó al CEIP que se concrete en un plazo de 15 días el vallado perimetral de la escuela, que tiene un cerco en el frente pero en el fondo no tiene ninguna delimitación. Iglesias recordó que hace años que se reclama el vallado en el centro, en particular porque hacia el fondo hay un cañaveral y “no se sabe dónde termina la escuela”. También se pidió que se haga un seguimiento de la denuncia policial, para lograr “un diligenciamiento pronto de la situación a efectos de la detención del responsable”, que se coloque una guardia policial, y que los días de licencia médica de la docente agredida no le afecten el presentismo ni la actividad computada, que es la que se cuenta al momento de concursar.

En la reunión de ayer, Caggiani confirmó que los arquitectos concurrieron a la escuela a medir el perímetro para comenzar los procedimientos para instalar el cercado. También se informó que hubo un cambio en la carátula del caso, que pasó de ser considerado un atentado violento al pudor a un intento de abuso sexual. Caggiani informó también que está concurriendo el equipo de Comunidad Educativa Segura y que se pidió al Ministerio del Interior un refuerzo de patrullaje, así como la asistencia a la víctima, y que el CEIP dispuso la presencia de un portero en la escuela. Ademu también reclama la presencia de un guardia policial, pero, según Iglesias, el sindicato consideró “de recibo” las respuestas del CEIP.