Hay numerosas “bandas de homenaje” a grandes grupos de rock, generalmente integradas por músicos que se dedican exclusivamente a eso, y también son frecuentes los discos de homenaje a grupos o solistas, con versiones de sus repertorios hechas por colegas destacados. Lo que no es tan frecuente es que un grupo de músicos de primer nivel grabe un disco de homenaje y siga adelante en esa línea mientras sus integrantes mantienen otras actividades. Particularmente si –a diferencia de lo que ocurre en el caso de Mateo x 6– el homenajeado está vivo y en actividad. Esto último es lo que ocurre con The Rada’s Old Boys, que se presentará este domingo a las 21.00, en la sala Hugo Balzo del auditorio Adela Reta del SODRE, y realmente es una suerte.

El grupo fue formado por el bajista Daniel Lobito Lagarde (que, cuando era muy joven y ya un intérprete de novela, fue parte con Ruben Rada de los grupos Tótem y Gula Matari en los años 70), el tecladista Ricardo Nolé (integrante de la banda del homenajeado en su exitosa etapa argentina de los 80) y el baterista Nelson Cedrez (su acompañante desde mediados de los 90), quienes editaron en agosto del año pasado, con la colaboración del flautista Pablo Somma, el notable disco Homenaje a Rada (ver comentario en http://ladiaria.com.uy/UQL), presentado dos meses después con un memorable espectáculo en la sala Zavala Muniz del teatro Solís. En aquella ocasión, el propio Rada se sumó a los cuatro nombrados al final, para varios temas, y lo que parecía inmejorable pasó a otra dimensión.

La cuestión es que ese trabajo, que combina grandes éxitos con joyas menos conocidas, con arreglos muy creativos que realzan o recrean el valor de cada composición, ganó este año el premio Graffiti a mejor disco de jazz, y –sea para festejar eso, por el placer de seguirla o por ambas cosas, poco importa– ahora los Old Boys, Somma y Rada (durante una parte de la actuación) volverán a tocar juntos, y cabe preguntarse si se hará costumbre un concierto anual. Estaría muy bien, entre otras cosas porque esta formación reúne a músicos muy talentosos, y de su cruce con un repertorio enorme, en este formato jazzero con una importante proporción de versiones instrumentales, no sólo surge una oportunidad de apreciar que si Rada nunca hubiera cantado también sería una figura enorme, sino también una de disfrutar de una combinación inusual de musicalidad, inteligencia, energía y swing.

Las entradas se pueden comprar mediante Tickantel y en la boletería del auditorio.